Una vida espinosa .

IV

Santiago se dejaria caer en uno de los bancos del parque , con un profundo resoplido , se quedaria mirando las nubes que pasaban por encima de el , totalmente cansado , ya que habia salido del horario del trabajo . 

Respirando con resignacion reuniria arrestos para ponerse de pies y y ir en busca de tranajo por la tarde o por la noche , ya que finalmente habia habandonado aquel trabajo de fregar el suelo por las noches  . 

Seguiria su andadura tras rechazo tras rechazo en los trabajos , decidiendo parar a comprar en un puesto ambulante unos chocolates , ya que habia pasado todo el dia sin comer , cuando por cosas del destino , se volveria a chocar con aquella chica que se habia cruzando en su anterior trabajo . 

- Otra vez tu ? que pasa que me estas siguiendo ? - le reprocharia aquella chica con cara de enfado . 

- Perdon señorita , no la habia visto , estaba comprando unos chocolates , si gusta probar uno - le responderia Santiago con una voz un tanto temblorosa , ofreciendole unos chocolates . 

- Mmmmm , bueno esta bien te cogere uno y te perdono por haberte chocado conmigo de esta forma tan brusca - sonrreriria aquella chica comiendo un chocolate .

Santiago se quedaria embobado mirandola como sacaba aquella sonrrisa , ala vez que comia aquel chocolate , sin poder decir nada , cuando la volveria a escuchar como le hablaba . 

- Oye , casi se me olvidaba , ya no te tengo visto limpiando en las oficinas , ya no vas ? - 

- Lo que pasa señorita esque renuncie al trabajo , ya que no me daba ganancia , y ahora pare este momento , ya que llevo toda la mañana buscando un nuevo trabajo para la tarde o la noche  , y mas ahora que acaba de terminar el año escolar y tengo que reunir dinero - le contestaria Santiago siguiendo un tanto embobado .

- Vaya , ya veo que eres un niño luchador , porque no te pasas por esta direccion , es la oficina de mi padre y busca a alguien que le ordene las cosas y limpie , no es mucho pero podria salir bien - le responderia la chica dandole una tarjeta , mientras que se empezaba a alejar . 

- Oye , dime como te llamas por favor  - le gritaria Santiago a lo lejos mirando como la chica se giraba hacia el . 

- Buscame , y sabras mi nombre - sonrreiriria de nuevo alejandose de todo , mezclandose con toda la gente . 

Santiago sacaria una sonrrisa de oreja a oreja y veria en la direccion que era un poco lejos el trabajo , pero aun asi tomaria la decision de dirigirse hacia el despacho del padre de aquella chica esa misma tarde . 

Seguiria caminando un buen rato , hasta que casi no podria con la hambre , hasta que se quedaria sentado frente a una pasteleria , quedandosele la boca agua , mirando todos aquellos pasteles que tenian en la vitrina del escaparate . 

- Toma muchacho , no es bueno que un niño de tu edad pase hambre , eso no es justo . - 

Santiago miraria para riba , y veria como habia un hombre tapandole el sol que hacia , con una bolsa de pastelillos - Oh , pero no es correcto que se lo acepte señor - 

- Por favor muchacho , se ve que lo necesitas estas en los huesos , aparte estoy totalmente seguro que tu harias lo mismo que yo si viese una imagen como la que yo estoy mirando ahora mismo frente a mis ojos . 

- Mu ... muchas gracias señor , nose como pagarselo - le responderia Santiago cuando estaria a punto de salirle una lagrima cogiendo aquella bolsa de comida . 

- No tienes nada que agradecerme chico , y buen provecho - 

Santiago cogeria aquella bolsa mirando como aquel hombre al igual que la chica de antes desaparecia entre la multitus de gente que habia , y se dispondria a seguir su camino . 

Pasados unos minutos Santisgo por fin llegaria al despacho del padre de aquella chica , y tocaria el timbre de esa casa , viendo como se habria el portalon entrando hacia dentro , quedandose sorprendido por el tamaño de esa casa , a lo que la chica le llamaba un despacho .