Mi Nueva Realidad.

no soy el unico...

Se acomodaron la ropa y reita subió a una de las habitaciones regresando con un collar y una Correa colocándola en el cuello del menor el cual lo miraba atentamente.

-p-para que es esto?- preguntó llevando sus manos al objeto que rodeaba su cuello.

-Es para que puedas regresar a casa - respondió seco Terminando de abrochar el collar que tenia el nombre del mayor al reverso en letras blancas  tomando la correa jalando suavemente de ella-

-Anda vamos...mas tarde entenderás por que lo digo.

Salieron de la casa y el rubio ayudo al menor a subir al auto en el asiento del Copiloto quitándole la correa para solo dejarle el collar, cerro la puerta y rodeo el auto para entrar por la otra puerta, comenzando a conducir en dirección a la casa de miyavi quien lo esperaba junto con el pelinegro, no tardaron mucho en llegar, aparco el auto afuera de la casa y bajo abriendo la puerta del copiloto ayudando a bajar a takanori volviendo a ponerle la correa, caminaron hacia la entrada de la casa y takanori avanzo un poco mas rápido de lo debido por lo que sintió el jalón que daba reita a la correa dándole a entender que caminara mas lento. Tocaron a la puerta y un hombre alto de cabellos de colores les abrió haciéndolos pasar.

-Akira ya era hora de que llegaras creía que tendría que ir yo a buscarte y traerte de las orejas -dijo hablando enserio soltando una pequeña risa-

-Jajaja ya quisiera ver que lo intentaras -rio de igual manera soltando la correa dejando que takanori estuviera mas cómodo al fin y al cabo de ahí no podría escapar bajo ninguna circunstancia.

-Ah llegado shiro?-pregunto el rubio sentándose en el sofá subiendo pies a la pequeña mesa -

-aun no.  - el de mechas de colores se hizo a un lado para que pasaran sus recién invitados mientras le entregaba un vaso con whisky-

-Gracias lo necesitaba  -reita sonrió  y lo bebió de un sorbo - aah refrescante

En eso escucharon como tocaban la puerta y el dueño de la casa abría dando paso al pelinegro que venia acompañado de un chico, takanori lo miro inspeccionándolo dándose cuenta que aquel chico era un poco mayor que el, era de cabellos castaños, finos labios y piel blanca, aquel chico se acerco corriendo y abrazo a Akira.

-Reita-san!!-grito el pequeño emocionado subiéndose sobre sus piernas-

-Hola Uruha-kun -sonrió el de la bandita y le acaricio el cabello al menor -te has portado bien?-dijo alzando una ceja sonriéndole -

-Si ! Si me he portado Akira -san    -el menor hablo con alegría en su voz al saber que tendría un premio.

-Toma aquí esta tu premio -susurro en su oído dándole una galleta en su empaque que traía en el bolsillo de su chaqueta-

Akira deja de engordar a Uruha-dijo seriamente aoi, el cual terminaba de entrar en la casa acomodándose en el sillón junto a ellos, Uruha se bajo de las piernas del mayor ante la mirada de su dueño y camino hasta quedar arrodillado en el piso a su lado-

-veo que tu mascotita trae collar reita, que lastima me hubiera gustado jugar un poco con el-

a pesar de haber tenido muchas mascotas entre ellos sabían que cuando le ponían collar era para los demás impensable tocarlo-

-claro que si, recuerdas que paso cuando se te olvido ponerle correa a uruha? jajaja no soy igual de imbecil.

el mencionado a ver que estaban ocupados se deslizo en silencio a la habitación de arriba, takanori lo miro con curiosidad y escucho la voz de reita hablarle.

-Ve con el y no rompas nada -le ordeno y volvió a su platica con los otros dos mayores. Takanori subió las escaleras algo nervioso y llego a la habitación en donde estaban dos chicos el castaño que conoció y otro que era menor que el por como 3 años el cual estaba levemente herido en el suelo.

-Vamos no te quedes ahí parado pásame el botiquín que esta en el baño-hablo Uruha ayudando a pararse al pequeño, ruki se quedo atónito al ver las heridas de aquel chico quedándose quieto en su lugar.

-Que esperas!?-volvió a llamarle Uruha comenzando a exasperarse  y aunque sonó desesperado su grito fue bajo ya que no podían descubrirlos, ruki reacciono y fue rápidamente al baño regresando con el botiquín en sus manos abriéndolo y pasándoselo a Uruha.

-Vamos kai tranquilo estas bien -Uruha movía hábilmente sus manos limpiando Sus heridas poniendo pomada y vendando las heridas mas grandes, al terminar de curarlo guardo todo y lo sentó en la cama.

-Gracias shima...-ruki escucho hablar débilmente al pequeño el cual lo estaba viendo y eso lo incomodaba un poco.

-Quien eres?-cuestiono aquel chico-responde!-hablo subiendo la voz señalándolo con su dedo índice, para ser tan pequeño tenia carácter.

-me  llamo tak...me llamo ruki ...-el menor bajo de la cama y se paro enfrente de el extendiendo su mano. -mucho gusto takanori  puedes decirme kai -aquel pequeño le sonrió de una manera que no compendia, como podía hacerlo en ese estado, el rubio semi castaño estrecho su mano en el saludo.-hola kai

-ambos sonrieron y se sentaron en el suelo junto a Uruha y ahí estuvieron platicando un rato sobre tontearías en las que ruki se entero que Uruha había sido secuestrado hace unos años y que era 4 años mayor que el ,también le dijo que se acostumbraría y se entero que al parecer reita era mucho mas paciente  que aoi e inconmensurablemente  mucho mas compasivo que miyavi, así siguieron hasta  que escucharon una voz fuerte sonar en la habitación.

-Uruha es hora de irnos-el mencionado se levanto se despidió rápidamente y salió detrás del pelinegro -

-ruki tu también despídete ya nos vamos.-takanori se levanto y moviendo su mano se despidió de kai el cual le sonrió mientras salían de la habitación, cuando terminaron de irse todos regreso a su triste estado de animo, cerro la puerta de su habitación en la cual solo había una vieja y  pequeña cama, una sabana y un espejo de cuerpo completo detrás de la puerta, se acostó en su cama e intento no llorar sabiendo que su mayor no tardaría en llamarlo y no tendría otra opción que ir.

Takanori subió al auto de reita y en todo el camino hubo silencio en el que  se la paso pensando a que se debían las heridas de que aquel chico aunque ya lo suponía.

-Que piensas ruki? -hablo reita rompiendo ese ambiente ya que desde que salieron el menor iba con la mirada perdida y parecía no estar en este mundo.

-No soy el único... - y esas palabras dejaron un poco desconcertado a reita por unos segundos... pero después lo entendió.