Mi pequeño príncipe

Capítulo 1

Annyeonghaseyo!! >.<

Siento que no podía llegar a viejita si no publicaba algo de esta pareja.

Es que son tan tiernoz ^▽^

Isjxisvzjnsjs.

....

Terminando la practica de baile, SeokJin se sentó en la esquina, sólo apartado de el grupo de los 6 animosos Bangtang que hablaban entre ellos ignorándolo completamente. Desde la distancia se oían como hablaban, se notaba que disfrutaban entre si de la compañía de el otro, había cariño, eso hasta un ciego lo vería.

De pronto Jimin abrazó por los hombros a Suga, los chicos les molestaron, mientras que la parejita se sonrojaba. Una presencia masculina se sentó junto a el, pero Jin estaba demasiado sumido en su envidia para percatarse de este.

—SeokJin — Dijo el rubio.

Ciertamente, el líder era el único con las agallas para acercarse al Hyung mayor, por eso las fans lo ponían con el de pareja, eran cercanos.

—Hola Rapmonster — Jin no movía un musculo, estaba muerto física y mentalmente.

—Te vez cansado.

—Lo estoy.

—Pero no es solo cansancio lo que tienes, ¿cierto?

Jin negó con la cabeza. Rapmonster lo conocía demasiado bien como para saber hasta por quien suspiraba su Hyung.

—He tratado de hablar con ellos pero son muy cabeza dura, no entienden y simplemente te dejan de lado.

—Dejalos, son jóvenes es normal.

—Hablas como la madre del grupo Jin.

—Medio Seul me cree así.

—Pero no lo eres.

El tono de el líder se mantenía fijo, entre calmado y demandante. Como un líder debería ser.

—Simplemente no puedo nadar contra la corriente, si el mundo deseo que fuera así, no puedo hacer nada contra eso.

—Vamos... No eres un chico tímido, eres una persona dulce y tierna, narcisista en algunos casos.

SeokJin suspiro por el tono tímido que usó el rubio en las ultimas 4 palabras. Incluso el líder no dejaba de temerle.

Cerró los ojos mientras una cálida lágrima caía por su mejilla derecha.

Aunque lo negara. Le dolía. Le dolía que el día a dia le dejaran de lado, que nadie de los Bangtang se acercara a hablarle o incluso un "Buenos dias" por la mañana junto a un café caliente, que alguien le esperara con las sabanas tibias y un gran abrazo.

La soledad lo abrumaba, mientras que lentamente caía en una depresión a causa de esto. Y tan solo había pasado un año. Un año de exitosa carrera, un año de disimulado fanservise, un año de dormir solo, de llorar solo, de gritarle a la nada porque nadie le oía, de tomarse la cabeza y presionar para sacar lo malo de su personalidad que alejaba a ala gente.

Su madre lo llamaba a diario, Rapmonster siempre le oía detrás de las puertas y siempre lloraba escuchando. Pero, una llamada a casa niega suficiente, tampoco el rubio podía estar con el a diario. Solo le quedaba abrazarse a si mismo en una esquina, ocupar el móvil ver youtube, hablar con algunas fans, jugar algo. Pero pronto la batería moría y con ello la mayor parte de si.

—Vamos a comer algo Jin Hyung —Dijo el líder sacándolo de sus pensamientos.

Jin asintió y se levanto. Era hora de el almuerzo, y tenia hambre, valla que si. Ya con el plato en sus manos, se sentó en una mesa para uno en el comedor de la compañía, ubico sus ensaladas, dio las gracias y comenzó a comer.

Una lágrima que cayo desde su mentón aterrizo en los fideos. Se las quito con los dedos y prosiguió a comer lentamente, para tomarse todo el tiempo posible y no verle la cara a nadie.

El tiempo lo había convertido en una persona fría. El Jin dulce, moría cada día.

—SeokJin, ¿estas listo para irnos? — El líder y su palabra amable siempre alegraban su corazón.

—Si, vamos.

Una vez en la camioneta de el grupo que conducía el mayor. El castaño encendió el vehículo, procuró de llegar lo mas rápido que pudo.

Lo primero que hizo, fue ir a la segunda planta a la habitación en la que dormía solo, saco algo de ropa de la cajones. Para dirigirse al baño de la casa, golpeo la puerta varias veces y, al ver que nadie contestaba entró. Se dio una larga y relajante ducha caliente tratando de quitar todas sus penas.

Se coloco su pijama rosa con orejitas, este venía acompañado de guantes a si que eran la mezcla perfecta para un día frío como el que hoy hacia. Se estaba terminando de arreglar el cabello cuando alguien toco la puerta.

—Adelante.

Dejó el cepillo aun lado en la mesa de noche. Volteo la mirada encontrandose con Taehyung, portando un envase de alitas de pollo.

—H-Hyung... — Las manos de el menor teblaban al igual que su voz.

—¿Que?

—Rapmon Hyung me dijo que le trajera e-esto.

Taehyung dejó el envase en la cama de el mayor luego, con la mirada en sus pies y jugando con sus manos, prosiguió.

» P-erdon si lo molesté, Hyung.

—¿Solo eso necesitas?

—S-si, adiós.

Cuando la puerta se cerró, Jin se maldijo a si mismo por haber sido tan frío. Conectó su celular a la fuente eléctrica y comió sus alitas de pollo, si bien estaba lleno... Que va, KimSeokJin, nunca tenia suficiente.

Se acurrucó entre sus sabanas y dejo que las orejitas taparan sus ojos, se dejo envolver por la suavidad y el calor de su pijama.

Cuanto lo amaba. Lo amaba tanto, que lo consideraba su bias.