Un buen día, ella dejó que su mirada paseara.
Él pasaba por allí, ajetreado, pensando en sus cosas.
Todo pasó tan rápido.
Ella sintió un latido más fuerte que los demás.
Él se sintió normal.
Ella quiso que ese lapso durara para siempre.
Él solo retiró la mirada e hizo como si nada... Después de todo solo era una persona más.
Sin embargo, ella en todo el día no pudo aislar de su mente la intensidad de aquellos ojos verdes.
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TÚ
Historia CortaEres lo que mantenía a mis sentidos cautivos.- Ella. Solo,..., no tengo tiempo para esto.- Él