¡No, no, no y rotundamente no! Aléjate de él, quien quiera que seas. Él es mío, aunque todavía no lo sepa.Golpeé la mesa, todos mis amigos voltearon a verme, tome un sorbo de mi bebida intentando despistar.
Volví a verlo de reojo, una pequeña risa se le había escapado.
Sonreí inconsciente.