Capítulo V: Secretos.

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- Entonces... Escogí trastorno obsesivo-compulsivo, ¿te molesta? -Dijo Alex mientras dejaba algunos cuadernos y libros en la mesa. Negué lentamente mientras miraba cada uno de los livros en la mesa. - ¿Por dónde comenzamos? –Dijo este algo nervioso.

- Si quieres, yo puedo ir buscando información por Internet y tu por los libros –Dije mientras me encogía de hombros. Estaba algo cansando.

Ayer no pude dormir mucho, gracia a Abigail. Su nota me había dejado muy pensativo. Y el que ella no me explicara porque no me tranquilizaba mucho, en realidad. Tenía que encontrar la forma de comunicarme con Abigail antes del lunes.

- ¡Claro! –Exclamo este. Lo mire unos segundos para luego agarrar la computadora y buscar en Google 'Trastorno Obsesivo-Compulsivo' –Oye Alan –Me llamo Alex antes de poder leer algo sobre este trastorno.

- ¿Sí? –Le pregunte.

- ¿Ayer no fuiste a la fiesta, verdad? –Me pregunto algo nervioso. Alex era un chico muy nervioso. Negué. – Entonces no sabes lo que paso.

- ¿Qué paso? –Pregunte mientras cerraba la laptop y le prestaba atención a Alex. Comenzaba a darme gracia el que Alex parecía una niña chismosa para ser un hombre.

- Abigail peleo con Hannah. –Dijo este mientras fruncía el ceño – De nuevo.

- Abigail me dijo que ella no iba a ir a la fiesta. –Dije mientras lo miraba algo confuso.

- Se suponía eso. –Dijo este frunciendo el ceño.

- ¿Por qué llego a pelear con Hannah?

- Los del grupo de Hannah, empezaron a inventar cosas sobre... Abigail y tu–Dijo este haciendo que me sintiera un poco ofendido. La gente siempre hablando de mas.

- ¿Qué cosas? - Pregunte algo molesto. Como odio cuando inventan cosas sobre mí.

- Que ella... y tu están saliendo –Dijo este algo avergonzado al ver como estaba molesto –

- Que idiota ira a creer en eso. - Dije sosteniendo mi rostro con una meno mientras recargaba el codo en la mesa y miraba hacia otro lado tratando de no darle importancia. - Yo no estoy saliendo con Abigail. Si acaso le hablo. - Respondi sintiendome un poco mal conmigo mismo por hablar de aquella forma, pero en cierta parte era verdad.

Mi comunicación con Abigail comenzo apenas esta semana.

- Abigail se molesto por eso y decidio ir aclarar las cosas. - Por el tono en el que hablaba me daba cuenta que Alex realmente se preocupaba era por Abigail mas que nada, y no era que fuera un chismoso.

- ¿Te gusta Abigail? - Pregunte mientras volvia a tomar el ordenador y me podia a leer sobre el tema que ya estaba en los resultados de Google.

Lo mire de reojo y me di cuenta de su sonrojo, tratando de ocultarlo con un libro.

- ¿Tan-tanto se nota? - Tartamudeo al preguntar, haciéndome sentir un poco mal al sentir celos de sus gustos.
- ¿Desde cuando? -

- Hace algún tiempo... Nada fuera de lo comun - Intento restarle importancia.

Aquello era increíble, Alex gustaba de Abigail. Por alguna extraña razón me hizo sentir enojado, pues habia empezado a sentir alguna atracción por la rubia.

- ¿Te gusta Abigail cierto? –Me pregunto tomándome por sorpresa. Lo mire unos segundos para mirar a otra parte con mis mejillas algo sonrojadas también.

- Si. –Respondí.

Era cierto, me gustaba Abigail, y no lo iba a negar.

- Mejor... Hagamos el ensayo –Dijo este tratando de cambiar el tema.

- Claro...

Cuando comence a leer lo que habia en la pagina, por un momento me senti mareado y confundido. La idea que paso por mi mente en este momento, era realmente descabellada, pero tampoco era como si fuera cierto.
Habia un 10% de posibilidad de que Abigail sufriera un trastorno. Leyendo lo que habia en la página y sacando conclusiones con sus extraños comportamientos, todo se asemejaba a las conductas de ella. Pero solo era una conclusión sacada de lo poco que habia visto en ella.
Mama suele decir que no se debe juzgar a las personas sin conocerlas. ¿Pero realmente podria ser eso posible?

- ¿Todo bien? - Pregunto Alex al ver que no dejaba de ver a la nada desde hace un rato. Habia quedado en shock.

- Si, eso creo...

Dije no muy seguro de mis palabras, para volver a concentrarme en el trabajo y dejar esas extrañas ideas a un lado.

SHE IS ABIGAIL Donde viven las historias. Descúbrelo ahora