Hoy estuve hablando con mi hermana, ella me contaba como quería enamorarse y sentir las mariposas en el estómago. Pero volvió mi yo dañado.
--¿Para qué gastar tiempo en el amor?, no sirve para nada, siquiera existe.
-- Te lastimaron, ¿verdad?
Suspiré-- Sí.
Se ve que el dolor que me dejaste ya no se puede disimular.
