CAPITULO 6

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Transcurrió 1 semana desde que Yannick le había pedido a Annick dejar de verlo, ambos habían seguido con sus rutinas, sin embargo, Annick no podía dejar de pensar en Yannick

- ¡Annick! –grito Monick llamando la atención de su amiga

- ¿eh, que pasa? –pregunto Annick sin comprender porque Monick había chillado su nombre

Monick la miro confundida –las clases ya terminaron, la profesora dejo de tarea investigar la revolución industrial y no olvides estudiar para el examen de mate –le dijo antes de abandonar el salón a toda velocidad

Annick soltó un pequeño suspiro, era la primera vez que su mente había estado en cualquier otro lugar menos en la clase, deseaba ir a aquel lugar donde había tenido su encuentro con Yannick, pero el solo recordar que el no deseaba verla la hacían retractarse

Dado que sus padres sobre todo su madre llegarían tarde a casa decidió quedarse un poco más de tiempo de la escuela así que se fue a la biblioteca a buscar un libro que la ayudara a hacer su tarea –//me pregunto si Yannick no se habrá vuelto a enfermar// –pensó sacudiendo su cabeza tratando de sacárselo de la cabeza

Repentinamente escucho unos gritos que venían de fuera del lugar haciéndola asomarse por una de las ventanas de la biblioteca viendo como Yannick nuevamente se estaba peleando contra una gran cantidad de alumnos del Yorkshire

-eres un animal, ¿cómo puedes estar siendo golpeado y seguir moviéndote? –pregunto uno de los sujetos que se encontraba en el suelo con varios golpes y algunas fracturas

Annick desde la ventana solo podía ver como Yannick se defendía y volvía a recibir más golpes, podía oír el tronar de los huesos de quienes peleaban, ver como la sangre les brotaba de las diversas heridas que tenían y como poco a poco iban cayendo inconscientes, 11 personas habían estado peleando, pero ahora solo quedaba Yannick

- ¡YANNICK! –le grito mientras salía de la biblioteca por la ventana donde había estado presenciando aquella violeta escena

Yannick al momento en que vio a Annick dirigiéndose a donde estaba por alguna extraña razón comenzó a sentirse débil, los sujetos con quienes había sostenido aquella pelea ya hacían inconscientes en el suelo por lo cual se aproximó a Annick con gran esfuerzo –creí... creí haberte dicho que no debíamos vernos –dijo haciendo lo posible por mantenerse en pie

Annick solo podía ver la gran cantidad de araños, moretones y cortadas que Yannick tenía, inclusive su ropa estaba rasgada, verlo así de herido solo consiguieron hacerla sentir triste y sin aviso alguno abrazo a Yannick – ¡estaba preocupada, creí que esos tipos iban a matarte! –exclamo apretando más su abrazo

Yannick al momento de oírla decir aquello supo instantáneamente que Annick lo había visto pelear –oye, llorona, vas a manchar tu ropa con mi sangre –le dijo mientras la abrazaba con su brazo izquierdo pues no era capaz de levantar su brazo derecho –esto es por lo que no deberíamos vernos –

Tras haber llorado Annick reacciono al sentir como Yannick estaba recargando todo su peso contra ella –tenemos que tratar tus heridas –dijo mientras se ponía de forma que Yannick pudiera apoyarse mejor llevándolo con cuidado dentro de la biblioteca

Una vez se alejaron de las ventanas a un sitio donde no pudieran verlos, Annick saco el mini botiquín que cargaba siempre con ella y empezó a tratar las heridas de Yannick

-no piensas violarme ni nada parecido verdad –comento Yannick mientras se quitaba el saco que formaba parte de su conjunto escolar permitiendo a Annick apreciar su fornido cuerpo

Annick solo pudo ruborizarte ante el comentario de Yannick –cla... claro que no –se defendió comenzando a aplicar alcohol en las heridas para proseguir a vendarlo notando lo ancha que era la espalda de Yannick ruborizándose aún más, una vez termino guardo todo dentro de su mochila – ¿estás seguro que no deseas ir al hospital? –

Yannick negó con su cabeza –estaré bien si simplemente descanso, es viernes así que no muchos me buscaran pelea –comento mientras se ponía a duras penas de pie

-espera –dijo Annick tomándolo por el brazo –se... sé que no deseas causar problemas, pero... pero tus heridas son serias... si peleas en ese estado puedes... –

Yannick supo lo que Annick había estado a punto de decir, sin embargo, su mirada se llenó de confusión al ver como a su compañera lentamente se le humedecían los ojos comenzando a dejar escapar pequeñas lagrimas – ¿Annick acaso estas preocupada por mí? –pregunto confuso

- ¡claro que estoy preocupada por ti idiota! –Grito abrazando nuevamente a Yannick – ¡siempre dices cosas tristes, te desprecias a ti mismo, yo... yo solo quiero que no estés solo, quiero que seamos amigos! –

Yannick no pudo evitar sorprenderse, jamás nadie la había mostrado preocupación o deseos de ser su amigo, incluso las palabras de Annick le resultaban extrañas, pero al mismo tiempo por algún extraño motivo le hacían sentir un calor nuevo –yo... yo no soy bueno con estas cosas... nunca antes nadie se había preocupado así por mí –

Annick pese a su llanto lo miro a los ojos, sus dorados ojos de alguna forma parecían decirle mucho pese a que Yannick no dijera palabra alguna –sabes, es increíble que tus ojos digan tanto –

-¿de qué hablas? –pregunto Yannick sin comprender las palabras de Annick

-mi padre suele decir que las personas que menos hablan no las mas sabias, las que más sonríen son quienes más sufren, quienes más serios son mejores personas resultan ser –respondió tomando entre sus manos el maltratado rostro de Yannick –aparentas ser alguien agresivo y rudo pero hay algo en tu mirada que demuestra lo opuesto –

Yannick no supo que decir, ser el calor de otra persona, escuchar cálidas palabras y que alguien lo mirara sin miedo o enojo eran cosas que jamás pensó experimentar, era algo agradable y lo hacían sentir a su corazón un calor nuevo, repentinamente sus piernas cedieron cayendo sobre Annick –lo... lo siento... no me siento bien –

Annick como pudo ayudo a Yannick a mantenerse en pie, y sin siquiera preguntarle comenzaron a caminar hacia la salida para dirigirse a su casa

-¿a... a donde me llevas? –pregunto Yannick mientras caminaba con ayuda de Annick

-a mi casa –respondió –vas a pasar el fin de semana en mi casa –

Yannick deseaba alegar pero se sentía tan agotado que simplemente dejo que su compañera lo llevara a donde quisiera, luego de un rato los 2 por fin llegaron a la casa de Annick quien tras dejar sus cosas en el primer sitio que vio, llevo a Yannick hasta la sala donde lo recostó en el sillón

-¿aun te sientes mareado? –le pregunto Annick a Yannick quien se encontraba recostado en el sofá

-un poco mejor –respondió Yannick sintiendo pesados sus parpados

-trata de dormir un poco, te despertare cuando haya terminado de preparar la comida –le dijo dándole una suaves palmaditas en la cabeza que lo hicieron caer dormido instantáneamente
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Hasta aquí llega este cap, espero les haya gustado

¿Que cara pondrá el padre de Annick cuando vea a Yannick?

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Nos escribimos y hasta el próximo capitulo

Dorada maldición de un Alma de plataDonde viven las historias. Descúbrelo ahora