Contrarios

7. ¿Amor a primera vista?

Era el recreo, iba a buscar a Dario.
Normalmente está en el jardín, es como "su sitio preciado". Casi nadie puede estar allí cuando ellos estén.

Y no es que huelan mal, justo es lo contrario, tienen "esa norma", el jardín es suyo.

Y yo, como soy muy chula, me salté esa norma, con perdón, de mierda y me adentré al jardín a hablar con Dario.

- Dario! - dije demasiado alto, luego rectifiqué mi tono de voz - ehh... Me tienes que dar el libro de la celestina.

- si, pues como no sea doraemon no se de donde lo voy a sacar. - levaté mis cejas esperando a que me dijera el porqué. - he utilizado la mitad de las paginas para hacer porros. - dijo tranquilo.

Se me cayó la mandíbula al suelo.
¡¿¡¿QUÉ ACABABA DE DECIR?!?!

- Pero queeee, ¿Y yo ahora que voy a hacer? - me puse a gritar como una loca - tu madre cree que si lo tienes. Y yo como ahora no tengo libro se lo voy a tener que decir a mi madre y tu ma...

Me puso la mano en la boca para que me callara.

Todos sus amigos se empezaron a reír. Yo no entendía nada.

- Pero ¿tu te crees que los porros se hacen con esas hojas? - dijo un chico que se llamaba Gabriel con lágrimas en los ojos.

- Y a mi que me cuentas. - Dije enfadada. - Entonces ¿le tienes o no?

- Si, en clase, luego te le doy, ¿vale, princesa?

- No me llames así, sapo.

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Ya había tocado el timbre y estaba esperando a Dario con Irene en las escaleras.

- Bueno, bueno, la princesa está esperando a su principe. - Dijo Gabriel

- No la llames así. - Dijo Dario y puso una sonrisa falsa a su amigo. - ¿Me acompañas a clase, princesa?

- Claro, sapo. - le miré irritada- ¿Irene vienes?

- No, me quedo con Gabriel. - La miré muy mal por dejarme a solas con Dario.
Gabriel e Irene iban juntos a la escuela de idiomas y les había visto varias veces juntos...

Fuimos de camino a clase de Dario.

- Oye, ¿de verdad fumas porros?

- A veces. Que, ¿Te preocupas por mi salud?

- Nah, haz lo que quieras.

Me dio el libro.

- Gracias.

- ¿Esto se merece un beso, no?

- No. - Dije cortante.

- ¿Ni de despedida?

- No, adiós. - Dije, y me fui.

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Estaba yendo a clase cuándo Carlos me paró.

-Eyyyyy rubiaa - imitó nuestra conversación de ayer - Me tenías que contar algo ¿no?

Le conté todo lo que me pasó con Dario (aunque ya lo sabía) y lo que sucedió en el recreo.

- ¿Que tienes con Dario? - me preguntó serio.

- Odio mutuo, nada más.

- Mutuo no creo que sea, a el le gustas, seguro.

- ¡Pero como le voy a gustar!¡Si hasta hace una semana no había hablado nunca con él!

- Se llama amor a primera vista.