Mirena Anghel

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_Sigo pensando que esta algo plana. -le digo a Silver que miraba a la chica junto con migo-. ¿Tú que crees? -el gato ladea la cabeza confundido, pero en el fondo sé que me entiende-. ¿Debería despertarla? -vuelvo a preguntarle a Silver y la rubia gruñe un poco antes de levantarse bruzcamente golpeando su cabeza contra la mia. Al no esperarme aquello pierdo el equilibrio y caigo al piso de madera-. ¡Au! -me quejo frotanto la sección afectada-. ¡Que torpe eres! -reclamo enojado levantando la mirada hacia ella que me observa asustada y agarra las sabanas cubriéndose hasta los hombros-. ¿Enserio? -bufo indignado. Tenía miedo de mi, como si yó le hubiese hecho algo. En verdad me enoja que me vea como a esos hombres-.

Como a esos hijos de... @^#$&
《la censura ante todo》

_¿Quién eres y donde estoy? -exige saber ella mirandome en una mezcla de miedo y rabia-. ¡¿Qué hiciste con migo?! -toma un cuchillo de la charola cercana a ella, donde por cierto se encuentra el desayuno que le prepare, y entrecierra los ojos de un azul superclaro-. ¡MAS TE VALE DEJARME IR! -se exaspera amenazandome con MI propio cuchillo-.

_Claro que te dejare ir. -le digo tranquilamente y me paro-. No esperes que te deje dormir en mi cama otra vez. -froto mi hombro para dejarle saber que me dolía el cuerpo por dormir en el sitio poco acolchonado y lleno de pulgas silverianas-.

Si todavia siguen preguntandose donde pase la noche, ahi les va la respuesta.

_¿Sabes lo incomodo que es dormir en el sofa? -recrimino malhumorado-. Es diminuto. -lo señalo en la sala desde mi alcoba-. Y con lo alto que soy tuve que retraerme como una horuga para poder caber.

_¡¿Y ESO A MI QUE ME IMPORTA?! -me vuelve a gritar-. ¡FUISTE TÚ QUIÉN ME TRAJO!

_¡¿Insinúas que querías que te dejara tirada en el suelo?!

_¿En el suelo? -baja la mano portadora del arma y agacha la cabeza pensativa-.

_Sí. En en suelo. -digo con los brazos cruzados-. Y dejame decirte que me estoy arrepintiendo. Debi marcharme y dejar que ellos te mataran.

Aclaración: Al decir ellos, no me refiero al trío pervertido. Mas bien a los monstruos del Claro.

_¿Ellos?... ellos... ellos me... -y asi de la nada, la chica se pone a llorar ocultando su cara detras de sus rodillas. Yó me quedo perplejo ante esta embarazosa situación. Confundido, no se como actuar-.

¿Que se supone debo hacer?

Se supone que debes de consolarla.

¿Yó?

Sí , tú menso. Anda y dile algo lindo para calmarla.

Busco las palabras correctas que decir, pues no quiero lastimarla, pienso que ya tiene suficiente con lo que le paso-.

_Oye... -sale de mis labios-. Tú, la niña llorona...

Perfecto Bástian, que gran forna de empezar una conversación. 《nótese el sarcasmo

_Perdon. -me siento al borde de mi cama-. No debi... decirte eso. Soy un idota. -inconcientemente poso mi mano en su espalda y la acarició-. ¿Que te parece si lo dejamos en el pasado? ¿Quieres un poco de té? -ofrezco y ella niega con la cabeza-.

MEDIA NOCHEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora