Una vez mas ha pasado esto, estoy harto. Mi cuerpo duele a morir, porque otra vez mi piel fue desgarrada. Rota, destruida para liberar a la bestia que llevó dentro. Quisiera morir pero no puedo, porque tengo miedo, porque soy un cobarde, no porque lo quiera, sino porque asi lo quisieron ellos. Estoy cansado.
Abro mis ojos, el sol es molesto a esta hora de la mañana, sin embargo a un asi es todo un alivio para mi, pues es quién me anuncia que la noche a terminado. Obserbo e identifico el lugar donde me encuentro, sigo en el bosque. Veo mí estado, mis ropas ahora solo son pedazos de tela rasgada que apenas cubren mí cuerpo. Me siento tan mal como aparento. Sin embargo ya estoy acostumbrado, o mas bien resignado a esta clase de vida.
Me levanto y camino sobre las hojas, que crujen cuando las toco. Me acerco hasta unos arbustos donde en mis vagos recuerdos, deje un poco de ropa:unos jeans y una camiseta para ponermelas. Efectivamente están ahí
"Que alivio" Pienso y me visto con tranquilidad. Estando en el bosque de Hoia-Baciu no tengo por que temer que alguien me vea semidesnudo, pues este bosque es el más temido en Transilvania. Fantasmas, ovnis, voces aterradoras, monstruos son solo algunos de los males que viven aqui. Como soy parte de ellos, no tengo porque sentirme amenazado. Con tal de que no entre en El Claro, puedo vivir tranquilamente codeandome con ellos. Avanzo por unos cuantos minutos y en seguida se ve la figura de mi cabaña a lo lejos. Esta vez no me aleje tanto con la anterior noche, es algo bueno. Unos cuantos metros mas y ya estoy frente a mi puerta, la abro y como siempre la soledad es la que me recibe primero, despues sigue el silencio, a continuacion el eco de mis pasos al dar contra la madera.__Que noche. -me recuesto en mi sofa viejo, que por alguna razón a sobrevivido a siete años de transformasiones bestiales-. ¿Cómo has estado Silver? -le pregunto al gato negro que aveces viene a visitarme, él duerme encima de la alfombra. Irónico, que un perro de mi tamaño permita a un gato dormir frente a él, pero así es. Ademas, tampoco creo que sea un simple gato. Él se aproxima a mi tiernamente y comienza a restregarse contra mi pierna. Realmente es la única compañía que tengo así que lo tomó en brazos y comienzo a acariciarlo-. Debes dejar de venir Silver, no es seguro para un gato vivir con un hombrelobo. -lo que dije pareció molestarlo pues dió un pequeño gruñido y saltó al piso para alejarse-. Adios. -me despido burlon y tambien me levanto para ir a mi cama. Despues de esta clase de noches, siempre me encuentro super cansado y con sueño. Otra de las desventajas de ser un licántropo.
En estos momentos mi cama se siente como un conjunto de nubes celestiales, tan suave. Seguro es porque cuando me transforme, me andube recostando sobre piedras o ramas y hojas. Sin mas que hacer, cierro mis ojos tratando de recordar lo que hice ayer, aveces funciona, pero la mayoría no. Bueno, es una buena distracción antes de quedarme dormido.
~·~·~·~
De vuelta estoy corriendo, la lluvia cae a raudales mojando todo mi cuerpo. De alguna forma siento que las gotas de agua me sofocan, siento que pierdo el aire y caigo de rodillas en el concreto de la carretera. Observo mis manos, son pequeñas, las manos de un niño. Giró la cabeza hacía el bosque a mi costado, esperando ver salir de las sombras al monstruo que me sigue, el que asesinó a mis padres. Lo espero asustado, incapaz de moverme, mis piernas se han vuelto inutiles y mis manos no hacen nada maa que temblar. Mi pecho duele, una extraña fuerza pareciera oprimir mi cuerpo. Siento tantas ganas de llorar, de gritar, pero tambien estoy cansado.
Entonces la oscuridad toma forma de lobo, uno grande con ojos inyectados de sangre y enormes fauces derramantes de liquído rojo. El se acerca lentamente, como si disfrutara torturarme psicologicamente antes de dar el golpe final... y se acerca... se acerca... mas cerca...~·~·~·~
Me despierto de golpe jadeando, llevó la mano a mi pecho y trato de tranquilizar mis latidos erraticos. Maldigo en mi interior, la misma pesadilla de nuevo. "Siempre es lo mismo" me digo molesto. No tengo idea de que hacer, estoy enojado con migo mismo, algo que ocurre frecuentemente. No se porque mi cerebro me sigue mostrando la misma escena, mientras mas quiero olvidarla, mas la recuerdo. Escondó mi rostro entre mis rodillas, cuentó hasta diez y intentó calmarme. Veó por mi ventana, el cristal me revela el sendero atraves de los árboles. Piensó en salir a caminar para despejarme, tengo entendido que esta noche habra un grupo de jovenes que vendran a acampar a este bosque, que serían utiles para olvidar mis pesadillas, aunque sea un momento.

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MEDIA NOCHE
Serigala JadianNunca quise esto, tampoco lo espere. Creía que era algo improbable. Pero ahora soy un hombre lobo...