Matarlo en mis manos o dejarlo vivir:

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Narra Ritsu:

Tenía la vida de Nat en mis manos, tenia dos opciones, tomar toda su sangre y matarlo sin que sufra y vivir con aquello por la eternidad, o condenarlo a seguir viviendo por la eternidad pensando que perderá cosas que hacía antes y ahora no.

Tome una decisión, tal vez no le guste a el por que tendrá que soportarlo, no puedo dejarlo ir, es el amor que espere por mi vida, tendré que vivir con el echo de que lo condene a vivir por la eternidad.

Cuando bebí la cantidad suficiente, lo lleve hasta la habitación y lo deje descansar, ya que cuando despierte tendrá que acostumbrarse a su nueva vida, prometere no dejarlo, lo protegere y cuidaré por la eternidad.

- Tendré que vivir con esto - dije cuando me fui al primer piso y me senté en el sillón.

De pronto sentí como alguien me tiraba en el sillón, me acostaba y se posaba encima de mi dejándome indefenso, puso una de sus piernas entre medio de las mías para dejarme inmóvil, cuando abrí con ojos vi que era Nat, estaba buscando sangre para saciar su hambre, tenia sus ojos rojos y brillantes, y sus colmillos sobresalientes.

- Nat, despertaste, yo l..lo siento tuve que morderte - dije viéndolo fijamente.

- No importa Ritsu, de echo te agradezco haber salvado mi vida, pero tengo hambre te puedo morder -

- Claro -

- Bien -

Cerré mis ojos, deje que clavara sus colmillos en mi para que saciará aquella sed que da cuando estas recién mordido, con la sangre de otro vampiro basta para saciar a un novato.

- Ritsu, que pasará ahora, que haré - dijo cuando terminó de morderme, tenia sangre corriendo por su boca.

- Pues estaremos juntos por la eternidad, y tendrás que adaptarte a lo que eres ahora, y tendrás que hacer me caso en lo que sea que te diga, para que no cometas ningún error -

- Bueno, pero como quito esto - dijo apuntando hacia sus colmillos.

- Emm... piensa en que quieres que vuelvan a la normalidad -

- Bien - dijo eso y se volvieron a la normalidad - Funcionó, gracias Ritsu - dijo eso y se tiró a mi pecho abrazando me, y yo le devolví en abrazo.

- Nat -

- Si? -

- Te amo -

- Y..y y...yo a t..ti - dijo mientras veía como se sonrojaba.

- Te ves muy tierno -

- No soy tierno! - dijo con una expresión de enojo, pero con su sonrojo se veía adorable.

- Si lo eres, tienes que aceptarlo -

- No no lo soy!! Y nunca lo seré! -

- Haré que algún día lo aceptes - dije esto y lo bese tierna mente en sus bellos labios.

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