Sensei x Sensei

Capítulo 2: El amor duele y yo te quiero mucho

Cerre la puerta del sótano, estaba tan nervioso de que todo fuese tan rápido ¡se había mudado a vivir conmigo! Supe que estaba despierto cuando hoy sus gritos de socorro, que mono, quería jugar, agarre el martillo y baje las escaleras al sótano.

-¿Es que has perdido la cabeza?- farfullo fuera de si - Quítame estas cuerdas ahora mismo.

-¿Ya te quieres ir?, pero si acabo de llegar- contesté.

Me estaba enfadando así que golpeé fuertemente su cabeza con el martillo provocando que un pequeño riachuelo bajara por su cabeza, el color rojo carmesí se veía delicioso y no pude más que acercar mi lengua y rescatar un poco de esa valiosa sustancia, de repente me excité, su sabor cobrizo recorrió mi cuerpo y entumeció mis sentidos, empecé a lamer más y mas, a veces, me llevaba trozos de caspa procedentes de su deliciosa calva, eran como pequeños nadadores que se adentraban en la boca del monstruo marino. Me bajé los pantalones y empecé a tocarme el miembro mientras lamía aquella fuente de lujuria. el empezó a despertarse pero antes de que pudiese hacer nada propine un fuerte golpe a su nariz, que a su vez comenzó a sangrar, dejándolo inconsciente de nuevo. Comencé a besar sus labios y después a morderlos haciendo caer más y más sangre, impaciente empujé mi mástil de carne contra su boca y comencé a mover bruscamente su cabeza, su cuerpo emitió un gorgoteó y una lluvia de vómito lleno mi cuerpo de cintura para abajo.

Mi erección creció y, cogí el aún inconsciente cuerpo de mi senpai, le baje los pantalones y metí mi lengua para explorar su cavidad, o dios era magnífico saborear aquel lugar prohibido. De nuevo despertó, pero esta vez, no ofreció resistencia simplemente emitió un débil lloriqueo. Sin aguantarme mas metí mi erección dentro de el a lo que respondió con un movimiento de sorpresa, todo paso muy rápido y angustioso hasta que finalmente mi veneno se desprendió de mi cuerpo, mi querido senpai estaba en el suelo jadeante, recubierto de su sangre y vómito y susurro unas débiles palabras. "más por favor"