Dejarse caer...

163 4 2
                                    

Ser sumisa es como pararse en una cornisa, de espaldas y vendada y lanzarte al vacío, cuando cuento mi historia algunos se sorprenden y otros me reprochan que ya no me entregue con tanta intensidad, para otros la intensidad que demuestro es demasiada, pero no puedo volver a ser como esa nena que a los 18 se dejó caer al vacío y no hubo nadie que estuviera para atraparme, ni para curar mis heridas y ayudar a levantarme, pase mucho tiempo en el suelo, rota y desamparada, tengo mis barreras, cometí el error de querer ser de nuevo esa nena y durante dos años estuve en una relación BDSM difícil, si algún día me paró de nuevo en esa cornisa y lo entregó todo de mi, porque es mi naturaleza buscar esa entrega profunda, he de tener la seguridad de que mi Amo estará con los brazos abiertos esperándome abajo.

Se me ha dicho que quiero mucho, que busco mucho, que es demasiado lo que espero de una relación, que le baje dos puntos a mi entrega, ¿Como lo hago? mi única defensa son mis límites y barreras, y si puede que a veces yo me ponga en medio de un campo minado y a otros se les haga difícil alcanzarme, si no tienes la paciencia en conocerme, en apreciar mis pequeños pasos, porque no es así la vida después de todo, si te rompen las piernas antes de volver a caminar te rehabilitas, y das pequeños pasos, vas poco a poco, no puedo evitar tener un pasado, y no pretendo usarlo de lastre, sólo quiero que el que sea mi Amo tenga la paciencia y el suficiente deseo de llegar a mi.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 05, 2016 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Un poco de mi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora