The Last Hope (Raura)

Capítulo 4

Narra Ross:

Me baje de la moto rápidamente y toque varias veces el timbre de la casa. A los pocos segundos me abrió Savannah con una sonrisa. 

- Hola, R...
- ¿Dónde está Courtney? - Pregunté de forma cortante.
- Está en su cuarto.- Respondió automáticamente extrañada por mi actitud.- Estás muy pálido, ¿te encuentras bien?

Ignoré la pregunta y entré a la casa chocando ligeramente mi hombro con el suyo. Ahora lo que menos me preocupaban eran mis modales.
Subí las escaleras de dos en dos y camine con rapidez el largo pasillo hasta su puerta. 

Abrí la puerta con brusquedad y la vi sentada en su cama leyendo tranquilamente mientras escuchaba música con sus auriculares. El sonido de la puerta la alertó y se quitó los auriculares mirándome sorprendida.

- ¿Ross, que..?

- ¡¿Se puede saber a qué estás jugando?!- Le grité descargando toda mi furia.

- ¿De qué hablas?- Preguntó frunciendo el ceño.

- De ese estúpido rumor que te has encargado de confirmar.- Contesté en voz alta.- Pero ¿cómo se te ocurre inventar semejante locura?

- Cálmate y dime de que diablos me estás hablando.- Se cruzó de brazos molesta.

- De la absurda idea de que estás embarazada de mí.- Escupí las palabras con asco.

Abrió los ojos con entendimiento, una pequeña sonrisa traviesa se asomó por sus labios pero a los pocos segundos desapareció y la furia se apoderó de sus mirada.  

- ¿Y qué te hace pensar que no es cierto? Te recuerdo que antes de que te fueras pasamos la noche juntos.

- Estaba borracho, ni si quiera recuerdo esa noche. Nunca debió pasar.- Aclaré con frustración.

- Pero pasó. Y puede que ahora mismo estés gritando a la madre de tu hijo.- Dijo con firmeza.

- No eres y nunca serás la madre de mis hijos. Sabes perfectamente que esta relación tiene los días contados.- Respondí con desprecio.

- Pero eso puede cambiar.- Su tono meloso me ponía enfermo.- Sabes perfectamente que yo puedo hacer lo que sea por ti.

Se levantó de su cama y se acercó a mí con intención de acariciarme pero atrapé su brazo con mi mano antes de que me toque.

- Quédate quieta, si no quieres que olvide que eres una mujer y no me contenga más.- Apreté el agarre de su brazo.

Su sonrisa desapareció y pude ver temor en sus ojos. 

- Desmiente esa mierda de rumor ya.- La solté y me di la vuelta dispuesto a irme.

- Todo esto es por esa estúpida de Laura, ¿verdad?- El desprecio y celos impregnaba cada palabra.- Te molesta tanto el rumor porque no quieres que esa perra se entere y nunca te acepte de vuelta.

- Lo primero de todo jamás vuelvas a insultarla.- El tono amenazante de mi voz la asustó.- Y segundo, lo que me molesta no es que ella se entere del rumor, sino que la gente piense que soy tan estúpido como para permitir que pase, así que desmiente este embarazo o te arrepentirás Courtney, y sabes a lo que me refiero.

Salí de esa habitación lleno de furia. Estaba terriblemente enojado con Courtney, con mi agente, con todo el mundo, pero sobre todo enojado conmigo mismo.

Estaba a pocos metros de la puerta cuando escuché a Courtney seguirme.  

- Ross, ni se te ocurra irte, no hemos acabado de hablar.- La voz de Courtney se hacían más fuertes mientras más se acercaba.