Obscuridad, Tinieblas, Frialdad.
No encuentro paz.
No encuentro ternura.
No encuentro amor.
Nadie dirige su mirada a aquel que siempre vive en tinieblas,
Ya a nadie le interesan los demás,
Ya nadie recuerda lo que es la compasión,
Ya nadie recuerda lo que es el amor.
Y todo es material.
Ya todo es desechable, incluso el amor lo es...
Ya no hay amor, ni ternura.
Ya no hay temor al desprecio.
Ya no hay luz ni esperanza.
Todo está perdido.
Todo está condenado.
Ya nada es igual.
Ya no hay por qué vivir.
Y cada vez me consumo más en las sombras
Porque ya no distingo ni el amor ni la frialdad.
Prefiero vivir en las tinieblas
Para ya no sentir más el desprecio y el desamor.