Nadie sabe de quien se enamora

Primeras clases del último curso

Sofía iba sumergida en sus pensamientos en el último curso de instituto, cuando iba caminando por los pasillos tristes y largos de su instituto cuando de repente observó desde lejos al típico chico que esta en el equipo de fútbol del instituto, quedo impresionada de lo guapo y sexy que podría llegar a ser Derek, y es que a todas las chicas que iban al instituto les gusta. Daniela detuvo sus pensamiento ...

-ey Sofía vuelve de tus pensamientos de pervertida- hice una mueca de borde.-y deja de mirar a Derek

-No estaba pensando en nada ni Mirando a nadie-odio cuando sabe que hago y en normal me conoce desde lo tres años.

Ella y yo nacimos el mismo día 18 de diciembre y vivíamos en la misma calle pero no fue hasta el jardín de infancia que fuimos a la misma clase y nos hicimos inseparables desde entonces somos como uña y carne .

Al comienzo de la clase de economía, me senté en el final de clase ya que esta clase se me hacia un poco aburrida y para mi mala suerte Derek se puso a mi lado, no penséis que era porque le gustaba, sino porque llego tarde y era el único sitio libre. En el fondo le a el la idea de ir sentado al lado de la rara de clase no era de su agrado y mas por la cara que puso de espanto cuando vio que ese era el único sitio.

Durante toda la clase estuve en tensión y seguramente que roja, y no era por no tener motivos es que ese chico volvía loca hasta las moscas y es que era alto, moreno, con un cuerpo bien trabajado ...mmm, cabello Moreno y unas piernas que daban infarto. Pero para mi peor suerte el solo se fijaba en la animadoras de equipo que eran rubias, altas y guapas, y yo era la rara de clase con gafas, pelo castaño claro y ojos verdes.

Cuando finalizó la clase no me dio tiempo a darme la vuelta cuando ya había desaparecido de entre la multitud.... Mis pensamientos en este momento eran pésimos tan fea era que quiso salir volando de la clase.

-    Sofía vamos a comer-dijo Daniele con su pelo suelto y con un movimiento de caderas que envidiaban a todos- he quedado con Ana. En la cafetería.

-    Vale, pero cuando acabemos ,e tengo que ir a casa que entro a trabajar en la tiendo de deportes- como no, chica rara y sin vida social.

-    Tranquila estaremos una rato, yo he quedado con el rubiazo- hice una mueca de envidia .

Ese rubiazo era Óscar el cual había conocido en la fiesta de despedir el verano, era demasiado guapo y moría de envidia de ver lo bien que le iba con el. La típica envidia sana que se dice y es que yo nunca había tenido novio y era entendible cuando salía de fiesta y ligaba llegaba a ser la tía más borde del mundo y claro pues, espantaba a los tíos,pero yo aun no me preocupaba del tema chicos porque aun era joven y tenía tiempo de sobra de enamorarme de un chico que valiera la pena.

Al llegar a la cafetería estaba ya Ana sentada en la mesa de la ventana y para mi mala fortuna junto al equipo de fútbol que estaba la mesa al lado. –Ana no había otro lugar más apartado¿ mis pensamiento iban a mil por hora y es que en todo el día me lo había cruzado mas que toda la vida de instituto ....