Todos se rieron, Diego estaba perplejo, Leonardo lo tenia pegado a su cuerpo quitando todo oxigeno y cercanía que hubiese.
-Anda, no seas tan difícil que ahora te he ganado por una manera justa-le decía el terrateniente. Diego soltó un pesado suspiro y se soltó de ese agarre.
-Sheriff, Leonardo, multitud aquí presente, quiero pedirles por favor que me dejen ir con este hombre hasta mañana, ahora mi familia no tendría a donde irse a vivir, y esta haciendo rete harto frió-dijo Diego implorando clemencia de Leonardo.
El terrateniente frunció al ceño, miro al Sheriff y este le pidió también consideración para la familia Orozco, Leonardo entonces accedió. Una vez aclarado ese punto salieron y se alejaron de ahí toda la muchedumbre como a un tiro de piedra, entonces Diego miro a Kevin su padre y le dijo:
-!Si sera usted re bruto apa! Ni nuestros burros harían tontería como la suya.-Le miro molesto-Nosotros pasando penurias, y usted ahí dándose la gran vida en las apuestas, en el pueblo, no puede ser-se llevo la mano a su cabello jalándolo.
-Y ahora ¿que haremos?-pregunto el papá
Diego chasqueo la lengua, miro al cielo y se tallo los ojos pensando en una salida para esta situación tan complicada en la que le habían metido.
-Yo no estoy dispuesto a ir a vivir con ese sujeto-comento por fin Diego rascándose la frente, fue entonces cuando se le ocurrió una brillante idea-¿Esta ahora de visita Paola, la huerca que trabaja en la capital?
-Si, pero se retacha mañana ¿por que?-
-Iré con ella, trabajare, no se de que, y les mandare dinero, Leonardo no los va a lastimar, a quien quiere es ami-los ojos de Diego se llenaron de lagrimas-Solo que los extrañare a todos, a mis hermanos, a Filemon, a Filomena e incluso a usted mi apa-
-Tranquilo mijo, esto pasara pronto, ya vera que mas tarde que temprano Leonardo olvida todo este incidente y usted podrá volver con nosotros.-le contesto el papá.
-No le diga nada a los huerquillos,preparare mi maleta y en la mañana me iré a buscar a Paola, si dice que no pues ya jalo solo pa la capital.-Comento Diego secando las lagrimas de los ojos.
A la mañana siguiente con las maletas listas, Diego se despidió en silencio de sus hermanos, a su padre ya no lo quería ni ver.
Bajo al pueblo, directo a la casa de Paola, esta al verle le reconoció, le abrazo y le paso dentro de la casa, Diego le contó de manera breve la historia a lo que Paola se quedo pensando y dijo:
-Cielos, eso esta grave,pero por suerte para ti mis patrones están contratando-se levanto del sofá, tomo el teléfono y marco un numero.
-Si, patrón ¿Víctor Guillermo Torres? Hola habla Paola patrón, quería preguntarle una cosa, vera usted, es que mi amigo pos tiene una situación sabe, y quisiera pedirle de favor que le contratara en el servicio domestico de la casa ¿si? Oh mil gracias patroncito, aja...si...aja..si...de acuerdo-colgó el teléfono y miro a Diego.-Ya estas dentro de la casa Torres Landa, tienes que partir hoy, yo me hubiera ido contigo pero el niño Víctor me ha hecho unos encargos.-Se fue busco una hoja de papel y anoto la dirección y paso a paso le explico a Diego como irse a la capital y como llegar a la casa de los Torres Landa
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Sueños de cristal.
RomanceDiego es un sencillo, humilde e ingenuo joven pueblerino que parte de su querida ciudad natal tras descubrir que su padre lo vendió a un terrateniente.. Al llegar a la ciudad de México Diego deslumbra con su belleza a Humberto Torres Landa, un apues...