-mierda. -susurré y cogí mi móvil, sin mirarle a la cara.- muchas gracias...
él sólo rió por lo bajo por mi reacción y yo levanté la mirada para saber quién era.
-¿dylan? -fruncí el ceño, al mismo tiempo que él.
-julie. -sonrió, al fin, algo... ¿aliviado?
nos quedamos callados durante un momento, observándonos, dios, que incómodo.
-que bien que hayas venido, pensé que estabas en el hospital. -soltó haciendo que yo esbozara una sonrisa de lado.
-bueno, no fue nada grave... -me encogí de hombros y miré a los lados intentando escaquearme de esta conversación tan incómoda.
-tengo que volver, luego nos vemos. -me sonrió de lado y se marchó.
me quedé mirando como se alejaba, hasta que desapareció por alguno de aquellos pasillos. al cabo del rato, volví a la sala, todas me miraban mal. solo fruncí el ceño y esperé a que me llamasen.
esperé durante una hora y media hasta que me llamaron. nerviosa, entré en la habitación, estaba dylan y...