Capítulo Uno: "El mismo sueño, otra vez"
"La fría arena se calaba entre los dedos de mis pies. Avanzaba, y, a pesar de mi fuerza de voluntad, no podía detenerme. Al llegar a la orilla un escalofrío recorrió mi cuerpo, pero no me detuve. Cada paso que daba me adentraba más, haciendo que mi vestido se mojara por completo. El miedo se apoderó de mi cuando mi cabeza se fue hundiendo más y más profundo. Por más que lo intentara, una fuerza me impedía luchar para salir. En un vano intento de gritar, sentí como el collar que llevaba se enredaba en mi cuello haciendo que el agua se adentrara por mi garganta hacia mis pulmones. Agité mis brazos para impulsarme, pero mis piernas se encontraban inmóviles. El pánico se hizo presente al dirigir mis manos hacia mi cuello latente..."
-Hey cariño despierta.
Abrí mis ojos y llevé mis manos hacia mi cuello respirando repetidas veces. Miré a mi madre que me observaba con preocupación mientras corría la sabana para mover las piernas de un lado a otro. Sentí como madre me rodeaba con sus brazos.
- ¿Estás bien cielo? ¿Es otra de tus pesadillas? – Asentí mientras ella acariciaba mi pelo tranquilizándome por completo – Debo irme ¿segura estarás bien?
Miré mi reloj y suspiré – Esta todo bien mamá, Sarah vendrá por mí en diez minutos.- Tomé el collar entre mis manos y lo observé.
Ella me examino una vez más antes de besarme la frente e irse. Pasé mis manos por mi cara y me dispuse a levantarme. Corrí hacia el baño hice mis necesidades y peiné mi cabello. Abrí mi armario, tomé una camiseta violeta y unos jeans negros. Por ultimo me calcé mis borcegos y bajé la escalera en busca de mi mochila. En ese momento oí la bocina del convertible de Sarah, al salir el calor me azotó inmediatamente.
Cerré la puerta del auto y me abroche el cinturón.
-¿Qué le pasó a tu cara? Estas peor que de costumbre- Comentó Sarah terminando de aplicarse rímel en sus pestañas.
Aw que buena mejor amiga.
-Tuve el mismo sueño otra vez, yo caminando hacia el mar, mi garganta llenándose de agua por completo, todo mi cuerpo inmóvil hasta que ... ¡BAM!, desperté.
Sarah saltó de su asiento haciendo que el rímel le pintara en la nariz.
- ¡Diablos Bleu! Arruinaste mi maquillaje- Buscó desesperadamente en su bolso y sacó una toallita desmaquillante para aplicársela en la nariz repetidas veces.
- Es la quinta vez que sueño lo mismo y lo peor es que no puedo controlarlo...-
- Bleu, deja de pensar en eso- Me interrumpió posando dos dedos en mi frente y comenzando a masajearla- No quiero ver arrugas en esa linda frente ¿Okey?
- ¿Puedes conducir? Llegaremos tarde - Quité su mano de mi frente y suspiré.
Ella arrancó el convertible rojo por las calles de Florida, mientras yo trataba de liberar mi mente unos segundos. Llegamos a la escuela y mientras que Sarah se acomodaba el cabello salté del auto y acomodé mi ropa.
-Allí esta Tony, ¡Vamos!- Antes de poner mala cara ella me agarró de la muñeca y me arrastró hacia la entrada de Clearwater High School. Sarah besó a Tony desesperadamente mientras que él agarraba su diminuta cintura. Carraspe para llamar su atención.
-Feliz cumpleaños Tony - Dije elevando el menton. El sonrio en respuerta y siguio besando a Sarah.
Quise voltear para dirigirme a clase pero unos fuertes brazos envolvieron mis hombros. Y allí estaba. El especimen mas insoportable de la historia conocido como Nathaniel Woods, capitan del equipo de surf, cabello corto y castaño claro peinado hacia arriba. Sus ojos verdes y cuerpo de infarto eran solo una distración de lo que en verdad era; Un inepto arrogante capaz de sacarme de mis casillas en menos de un minuto. Tenia la capacidad de molestarme cada vez que se le presentara la oportunidad.
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A Drop Of Water ©
FantasíaBleu es fuerte, como el océano. Bleu es intensa, como las olas de este. Bleu es misteriosa, y esconde un secreto que ni ella se imagina. Nathaniel, descubrirá ese secreto. Al cumplir los diecisiete años, las pesadillas de Bleu se hacen más consta...