Harry tenía todo listo para esta noche. Esta noche en la que Niall volvería con él.
Él volvería con Niall. El amor volvería a ambos y la felicidad sería completa.
Nada podía salir mal.
Ahora estaba ansioso queriendo terminar esta fiesta donde tenía que hacer presencia, de una vez, para poder ir a casa, junto a Niall...todo se siente como volver al hogar.
No puede esperar a poder estrechar de nuevo entre sus brazos a Niall, como aquel primer día en el que se vieron y se sintió, de hecho, como el hogar.
Quizás era el destino. Quizás Niall es simplemente el hogar donde Harry siempre debe regresar.
Y él está más que bien con eso, a decir verdad.
Harry estaba que rebotaba en sus propios pies y la verdad es que todo el mundo a su alrededor se la pasaba preguntándole que lo tenía así, ya que ni los conciertos lo excitaban tanto.
Y ama los conciertos, los disfruta como nadie y nada es tan bueno como cantar en un enorme escenario con toda esa gente que está ahí para ti.
Pero las cosas cambian cuando tú estás solo para una persona. Eso puede emocionarte mucho más.
Y Harry ha estado solo para Niall desde hace meses.
Camina contento y con la sonrisa pegada en el rostro como ha sido los últimos días, ya casi despidiéndose de la gente, porque no puede esperar para ir a casa, cuando una cabeza rubia familiar le llama la atención.
El pelo de Niall es una cosa especial porque no solo fue una de las cosas que primero le llamó la atención, si no que siempre llama la atención, porque es un horrible teñido mal hecho.
Claro que Harry nunca se lo dirá, pero es la verdad.
Quizás se lo diga un día. De todos modos, si llegan al altar, Niall no puede tener ese pelo a su lado. Se lo teñirá él mismo de ser necesario.
Porque claro que llegarán al altar...¿de que otra forma puede terminar este amor?
Más bien, ¿de que otra forma puede empezar este amor?
Pero Harry se queda congelado una vez que deja de pensar en Niall y su tonto teñido, cuando ve una mano enorme jugando con su pelo, como nadie más que él mismo debería hacerlo.
Y otra mano igual de grande, casualmente postrada en la cadera del rubio, como nadie más que él debería tocarlo.
Sí es Niall, claro que es él.
Mientras Harry se acerca a paso lento puede verlo mejor y escuchar su risa inconfundible, verlo echar la cabeza hacia atrás y notar como sus manos parecen tan pequeñas sobre el pecho de la enorme roca en forma de hombre parado frente a él y mirándolo con adoración.
Es la mirada que Harry siempre tiene hacia Niall y que probablemente todo el que lo conoce tiene, en realidad.
Harry empieza a sentir un crujido dentro de él.
Presiona el pecho con una mano abierta sobre él, cuando se queda congelado justo donde está, al notar que los rostros de ambos chicos a quienes mira se acercan demasiado.
Se besan.
Algo en Harry se rompe en pedazos.
Parpadea fuertemente pero nada borra el hecho de que Niall esté besando a un hombre frente a él.
Harry voltea rápidamente y empieza a caminar lejos del dolor.
Sale afuera en busca de aire porque la opresión es demasiada y cree que podía vomitar.
Se encuentra solo en la oscuridad y se deja caer contra la pared, con una mano aun sobre el pecho.
Cierra los ojos y respira profundo. No, eso no puede estar pasando se dice a sí mismo.
Y aunque así fuera, no es algo que no puede resolver. No es la muerte, después de todo.
Niall está besando a un hombre, sí. Pero bueno, Niall no está con Harry en una relación a toda regla en realidad, así que no es un engaño.
De todos modos, nada puede arruinar este día, esta noche.
Harry ya tiene el anillo, la corona de flores, la canción, la declaración...
Harry tiene un corazón envuelto en papel de regalo, que aunque ya esté algo roto por el mismo Niall, aun lo ha amado con todas sus roturas, aun lo amaría si estuviera hecho a pedazos y solo quiere entregárselo a él de nuevo.
De todos modos, Niall es su dueño y las cosas siempre vuelven donde pertenecen.
Y Harry sabe que Niall lo ama también y sabe que ha dejado de salir con otras estrellas por él, sabe que lo ha elegido sobre todas ellas.
Sí, esa es la verdad.
Sonríe un poco de nuevo, aunque esta sonrisa dista algo de las sinceras y enormes que tenia últimamente pero sonríe al menos, esperando que esto haya sido un error o algo que Niall fácilmente podría explicar.
Harry solo debe volver adentro y buscar a Niall y decirle todo de una vez, no tiene el anillo ni la corona con él, pero tiene lo más importante, su corazón que late por el de Niall.
Puede hacer frente a todo con eso.
Eso es lo más importante cuando uno ama de todos modos.
Así que se para correctamente de nuevo, empieza a caminar hacia adentro otra vez dando largos suspiros para calmarse y parpadeando para no llorar.
No puede llorar cuando le diga a Niall que lo ama, eso sería ridículo.
Apenas al entrar al sitio lo ve de nuevo, solo ahora caminando hacia al costado.
Bien, está solo. Eso debe ser una buena señal.
Harry lo sigue y se arrepiente al momento en que ve como el rubio se tira en los brazos de otro chico y este lo recibe de buena gana, amoldándose por completo a su cuerpo.
Y luego, sus labios se unen también.
Y esto es demasiado para Harry que ahora si se deja romper.
A veces creo que tengo una especia de trauma no resuelto con hacer sufrir a Harry cuando él es siempre mi personaje más bueno.
Lo bueno es que se que no soy la única que lo hace, así que no soy del todo anormal.
Silencio a todo el que insulte a algún personaje, especialmente a Niall. No tengo porque leer comentarios estúpidos en mis creaciones.
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Little Things (Narry). Completa.
FanficDonde Harry es un popstar que vuelve a casa y Niall es un estudiante de Literatura que trabaja en una tienda de flores.