Eran casi las doce de la noche.
Estábamos abrazamos.
Esperábamos los fuegos artificiales.
Nunca llegaron.
Pero ver tus ojos fue suficiente para mi.

nueve
Eran casi las doce de la noche.
Estábamos abrazamos.
Esperábamos los fuegos artificiales.
Nunca llegaron.
Pero ver tus ojos fue suficiente para mi.