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Harry's POV.
Finalmente pensé en poder platicar con ella tranquilamente y arreglar las cosas, se me hecho a perder el plan. ¿Porque Megan querría llamarme a estas horas? Le dejé claro hoy en la mañana escrito en papel, que no quería nada con ella, que sólo iba a dedicarme a mi mujer, y es eso lo que no le ha parecido bien. O tal vez no me creyó, que puede ser otra posibilidad.
Megan. Si, hubo un tiempo que sentí una maldita atracción por ella. Es decir, tiene unos veinte y dos años, con un cuerpo bien formado. Cada vez que la veía, tenía una excitación de mil demonios, que aquello me duró nada más un mes. Pero al parecer ella a confundido las cosas, piensa que siento algo por ella. Debo de admitirlo, he sido más estupido, al no dejarle en claro las cosas desde un principio. Nada de sentimientos. Nada podía salir a la luz. Sólo era sexo, no amor.
No tengo el valor suficiente para ir hasta el cuarto y ver a ______ a la cara. No fui suficiente hombre, me pase de sinvergüenza con ella, de canalla y jugué un papel de mal marido con ella.
Todo se vino abajo, incluyendo aquella idea de pasar una buena noche con ella.
Suspiro frustrado, y vaciló con las llaves del auto. Decidido acabar conmigo mismo, salgo de la casa y entró a la camioneta. Me paralizó un momento, dudando en que podía hacer. Y en sí podía salir bien.
Arranco, y está vez tenía que prepararme para recibir los uñazos de mi actual amanate. Alguien debería hacerme ver cuánto vale ______ para mi, pero eso solo lo puedo describir por mi mismo.
______'s POV.
No se si lloraba de la rabia o del dolor que sentía. No por él, si no por ella. Harry es hombre, y puede caer ante cualquier par de senos que le pongan enfrente. Todo hay que decirlo, él no tiene la culpa. Al menos no del todo.
Al recibir la llamada, inmediatamente reconocí aquella chillona y fastidiosa voz. Megan la secretaría de Harry, y vaya que ella si sabe como hacer ver lo que es una mujer ardida.
No es por parecer vengativa, pero me lástima el hecho que Harry tenga ese tipo de amigas ocasionales. Algún día le daría con el periódico en la boca, igual que las perras.
"Recuerda que me darías los papeles de tu divorcio, y mi regalo por nuestro aniversario" recordé sus palabras, y una daga de metal se cruzó de inicio a fin por mi corazón. ¿Desde cuando está con ella? Le había prometido los papeles de nuestro divorcio, es porque si quiere algo formal con ella.
Cuando escuché el sonido de la camioneta, me asome por la ventana, y supe para donde se iba. A revolcarse con ella.
Cierro los ojos, tapando mis labios con mi mano, queriendo evitar llorar.
Me alejo del marco de la ventana, y me siento al borde de la cama. Pensé en como él la tocaría, de la manera en que a mi me gustaría. Que le diga todas aquellas hermosas palabras que yo tanto quería. Lo tendría a él, a quien yo jamas yo puede tener.
