Frashield

CAPITULO III

Luego de dos largos años, Janna – la chica del bosque – se encontraba a pocos días por dar a luz a su hijo Frashield, fruto del amor prohibido que había mantenido con Clerk – joven elfo del bosque – el cual se encontraba luchando arduamente por su reino en la Segunda Guerra Mundial como soldado de arquería.

Los Elficor tuvieron grandes pérdidas en este suceso al enfrentarse a sus 2 grandes enemigos. La mitad de su territorio fue arrebatado, así como la vida de muchos soldados. Los daños causados en las viviendas cercanas provocaron la evacuación de los habitantes a zonas seguras.

La guerra perduró más de lo que se tenía previsto. Los Elfos estaban resistiendo, aunque su derrota era innegable no se daban por vencidos, logrando un retraso de líneas enemigas de tres semanas, pero al cumplirse el mes con el dolor de su alma establecieron la derrota.

Sin embargo, Janna que había permanecido refugiada durante toda la calamidad junto con el resto del pueblo, se vio obligada a dar luz a su pequeño días posteriores a la culminación de la guerra.

Aquel niño –si se le podía llamar así– era fruto de un tabú. Ella y Clerk no solo habían roto las reglas, sino que también rompieron las leyes de la naturaleza impuestas por los primeros ancestros.

Seguramente no les importo en lo absoluto.

Era inevitable ver como el nacimiento de Frashield era diferente al resto de humanos, los únicos rasgos adquiridos por parte de la madre, Janna, fueron un hermoso color de ojos marrones claros. Sin embargo, no era suficiente para pasar inadvertido, lo que más sobresalía sobre el niño eran aquellas orejas puntiagudas otorgadas por los genes del padre. Janna astutamente ocultó las orejas del pequeño Frashield con una manta alrededor de su cabeza, dejando al descubierto solo el rostro y así lograr entrar a su reino sin ser descubierta.

Días después junto con su recién nacido se dirigió al lugar donde era una costumbre para ella y Clerk encontrarse a mitad de la noche. Las horas transcurrían con rapidez y la presencia de Clerk no daba señales, Janna comenzó a preocuparse de que pudo haberle pasado algo, decidió inspeccionar una vez más el lugar por cualquiera cosa.

Lo cierto fue que jamás llegó. Y a pesar de mantener las esperanzas día tras día no pudo encontrarlo.