Ni para ti tanto, ni para él tan poco.

CAPÍTULO 7

Me está mirando a los ojos, sus ojos son la cosa más preciosa que he visto nunca. Se está acercando a mí y yo no me muevo, pero entonces oigo que alguien grita.
-¡ZORRA!- Me giro y veo a una chica, juraría que es Eli pero no lo puedo asegurar. Entonces se giran y se van y veo que las dos son morenas. Eli no es morena, es rubia, así que no son mis amigas.
- ¿Pero qué?-Me pregunta Chris confundido.
- Ni idea. – Entonces pienso en Eli y Chris, en cómo estaban esta noche, y empiezo a llorar otra vez. Soy retrasada.
- No llores, tranquila, cuéntame lo que te pasa.- Me dice Chris.
Y me estreso.
- ¡PUES TODO PASA JODER! T-O-D-O. ESTOY HARTA DE TODO Y DE TODAS. ESA TÍA NO SE CONFORMA CON FOLLAR CADA NOCHE Y CON VARIOS TÍOS, SINO QUE TAMBIÉN TIENE QUE HACERME SENTIR PEQUEÑA E INUTIL, ¡JODER!- Grito llorando.
- Eh, está bien, ¿de quién estás hablando?
No puedo hablar, lloro desconsoladamente. Entonces Chris me abraza muy fuerte. En cuánto me suelta me siento al suelo apoyada en el muro, y Chris se sienta a mi lado.
- Me puedes contar todo lo que quieras, no me importa de quién estés hablando ¿de acuerdo?- Me  asegura.
Suspiro.
- Está bien. De Eli.- Le digo preocupada. Tampoco le quiero echar sus actos en cara.
Él sonríe.
- Así que celosa, ¿eh?
- ¿Qué? – Le pregunto algo confundida.
- No sé, antes me has dicho que te duelo, y ahora...- Pero le corto antes de que termine la frase.
- Ya, bueno, es que lo haces. – Le digo.
- ¿Y eso?
- Pues supongo que ya lo sabes.
- No, no lo sé.- Me dice riéndose como un niño.
- No, ya.- Le digo con ironía.
- No.- Me dice.
- ¿No?
- No.
- Pues Eli sí lo sabe.- Suelto.
- Y esa es la razón de todo, Eli.- Me dice haciendo un gesto equivalente a "obvio".
- O no.
- ¿No?- Me dice riéndose como un loco.
- No sé.
- Ya, no sabes.
- No.
- ¿O sea que no es por ella?
- No
- Ni por tus amigas.
- No
- ¿Por mí?
- No...
- ¿Por otro chico?
- No
- ¿Puedo besarte?
- No. – Espera, ¿QUÉ QUÉ?
Pero para cuando reacciono ya lo tengo pegado en mis labios. Abro los míos para permitirle el paso de la lengua, y nuestros sabores se juntan, cómo estoy incómoda en esa posición, paso mi pierna per encima de las suyas y me siento a horcajadas encima de él, nuestras lenguas combaten y el calor se apodera de mi cuerpo, no esperaba que pasase esto, no así al menos. Me coge de la cintura y me levanta un poco, baja sus manos hacia mi culo y me lo pellizca. Siento que me falta el aire y me separo por unos segundos, cojo aire y me pego a sus labios otra vez, mi corazón bombea la sangre a cien por hora y oigo como Chris suelta un pequeño gemido. Me aparto y nos sonreímos.
- Besas mejor de lo que pensaba.- Me dice, su respiración es agitada, y juntamos nuestros labios una vez más.
- ¿Es que te preguntas como beso?- Le digo casi sin aire, antes de volver a entrelazar nuestras lenguas.
- Puede.- Y sonríe.
- Joder, tu sonrisa es lo más bonito que he visto nunca.- Le digo. Una carcajada sale de sus labios y me besa otra vez, y, joder, esta vez no sé cómo, pero aún hay más pasión y nos seguimos besando y seguimos cogiendo aire, y seguimos dedicándonos sonrisas, y la noche acabará mejor de lo que ha empezado.