Capítulo uno: ¿Quienes sois?

1.3K 75 17
                                    

Era un día normal. Bulma y Chichi estaban en la Capsula Courp (la casa de Bulma).

La peliazul se aburría más de lo normal.-Oye ¿y si invitamos a Lunch y a C-18 para hacer una fiesta de pijamas?

Chichi miró a su amiga que se había entusiasmado al gritar la invitación :Claro ¿Por qué no?-Sonrió.

Bulma salió con emoción del cuarto en busca del teléfono para llamar a sus amigas, que accedieron encantadas.

Al llegar la noche Bulma y Chichi prepararon la casa para que pareciera una verdadera fiesta de pijamas.

-Bulma.-repetía por décima vez la morena.

La peliazul seguía entusiasmada y no hacía caso a su amiga.-Faltan palomitas.

-¡Bulma!

-¿Si?-Contestó

Chichi señaló a la dirección de la puerta.

Desde la puerta una voz gritana-Abrirme que me conjelo aquí fuera.

Era Lunch. Bulma al oír la voz de su amiga abrió rápidamente-Perdón Lunch-Rió.

La pobre Lunch entro a la casa muerta de frío.-Nada, no pasa nada.

Chichi trajo una manta.-Toma.

-Arigato Chi-san.

Ya paso la hora de quedada. Bulma se impacentaba porque C-18 no llegaba.-¿Dónde estara esa rubia, es una desastre con las horas?

Tranquila chicas, ya vendrá...-Rió nerviosa Lunch.

Chichi miro a la ventana y vió un reflejo-Chicas mirad.

Las tres chicas miraron cuando por la ventana entro C-18 volando-¡Aah!-Gritaron Bulma y Lunch.

Buenas-Grito C-18-¿Por qué gritáis? ¿Estáis bien?

En torno sarcástico Bulma se acercó hasta la rubia-No se señorita, quizás porque llegas 38 minutos tarde.

C-18 se echo a reír-Anda lo importante es que he llegado ¿No?

Bulma la miró con mala cara.

-Bueno chicas porque no nos ponemos los pijamas y no lo pasamos bien-dijo Lunch relajando el ambiente

-Bu..Buena idea-Dijo Chichi llevándose a Bulma a el cuarto

Cuando llego la hora de irse a la cama, despues de la larga "fiesta", Lunch y C-18 se quedaron dormidas muy rápido juntas en el mismo saco, mientras que las otra dos chicas compartían saco. Chichi estaba apunto de quedarse dormida Bulma la despierta-Chi...Chichi he visto algo.-La mueve con fuerza.

Chichi abrió un ojo-Mmmm.. ¿Qué?-bostezó-Será alguno de tus animales.

Bulma suspiró-Es verdad.-Se sonrojó.-He visto una cola. Hasta mañana Chi.

Chichi dormia y no lo escuchó.

Bulma abrió un ojo tímidamemte y observó que no estaba en casa. Sespertó dentro de una especie de "nave".
Miró a sus amigas que se encontraban en unas camas cada una, atada cada cual a su respectiva cama. Bulma intentó moverse pero estaba atada con cuerdas rarisimas. Por el rabillo del ojo vio pasar una sombra de pequeño tamaño.-Tú, enano. ¡Suéltanos! ¡Hijo de...!

La sombra se paró en seco y se giró ante la chica.

-¿Le vas a ordenar TÚ a un príncipe de los sayains?

La sombra se acercó descubriendo su rostro. Era un muchacho muy guapo para el pensamiento de Bulma, fuerte, moreno...

-Cállate mujer.

Bulma observó que detrás de él aparecieron tres sombras más: dos personas altas y uno bajito.

La peliazul se asustó al oír a su amiga gritar.

Bulma la miro-Cállate, vas a despertar a Chichi y a C-18.

Pero ya era tarde, las dos chicas se despertaron al oír los gritos de Lunch-¿Qué...Qué coño pasa aquá?-dijo Chichi al verse atada.

Bulma miro a sus amigas con cara rara.-No sé? yo tampoco se que hacemos aquí.-Se encogió de hombrls y miró al enenano.-Pregúntadselo a estos bichos.

El primer muchacho le tapo la boca a Bulma-Cállate, humana, no te lo repito más.

-¿Quiéne sois?-Dijo la rubio.

-No os importa de momento, y no nos hagáis màs preguntas, ¿de acuerdo?- Dijo un chico alto y con los pelos alborotados de color negro.

-Pero porlomenos nos podeis decir vuestros nombres.-Dijo Lunch blanca como una hoja de papel.

-¡Eso es irrelevante ahora!-Gritó Chichi.

El más alto de todos los chicos le contestó a Lunch con desagrado.-Somos sayains. Me llamo Raditz, él es mi hermano pequeño Kakarotto. El es Krillin y él.-señaló al joven que estaba enfrente de Bulma.-Es el príncipe de los saiyans, Vegeta. Ahora hasta que no lleguemos al planeta no se hacen más preguntas ¿entendido?

Cuando a terrizaron la nave las chicas estaban nerviosas, no sabían lo que les iba a pasar en ese planeta extraño lleno de hombres y mujeres con cola de monos.

-Te... tengo miedo.-Dijo Lunch.

-Tranquila.-Sonrió Chichi.-Todo estará bien.

Las desataron para poner sobre su cuello una correa de hierro.

-¿Somos ahora perros, o qué?-Dijo retante la rubia.

-Es para que no os escapéis.-Respondió Vegeta seco.

Las sacaron a rastras, tirando más y más de ellas hasta llegar a una hombre idéntico al joven de los pelos alborotados.

Hola padre.-dijeron Goku y Raditz al mismo tiempo.

Bardock los miro pero no dijo nada.

-Menudo recibimento a sus propios hijos, ni un hola si quiera.-Dijo la morena.

Bardock la miró con mala cara a la chica con el pelo negro, igual que sus ojos, parecía una sayains pero no tenía cola y tampoco era muy fuerte.

Bardock-¿Esclavas nuevas?

¿Será amor...? ¿O odio?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora