Louis se paso los siguientes días pensando en Harry. Su conversación con el había sido un tanto extraña pero eso a el no le importaba, al fin y al cabo consiguió lo que quería.
Un amigo.
Louis estaba un poco más feliz, digo un poco porque Louis aparte de tener problemas en la escuela, también los tenía en casa.
Al parecer su madre estaba enferma, y no de cualquier cosa.
Tenía cáncer...
Y por lo que dijo el doctor , era terminal.
Así que para Louis , Harry era su vía de escapes de los problemas.
Louis se paso los siguientes días haciendo la tarea que tenía pendiente debido a que faltaba continuamente a clases.
Maldita escuela.
Después de terminar todos sus pendientes , Louis se encontraba nuevamente frente a la dichosa ouija.
Hizo lo mismo que la vez anterior, pero el puntero seguía sin moverse.
Asi estuvo Louis alrededor de una 1 hora y nada.
Los un poco triste decidió irse a dormir, pero mañana intentaría
volver a contactar con Harry.Los siguientes días fue más de lo mismo. Louis se posicionaba delante de la ouija, preguntaba si había alguien ahí con el, pero se terminaba llevando la misma decepción.
Harry no contestaba.
Louis cada día que pasaba se hacía la idea de que Harry ya no quería platicar más el.
Así que Louis lo tenía decidido, esa era la ultima noche que intentaría ponerse en contacto con Harry.
Comenzó con la misma rutina, se posicionó delante de la ouija y pregunto.
"¿Hay alguien ahí?"
Espero 5, 10...hasta 15 minutos, pero nada
Hasta que el puntero se movió y una sonrisa atravesó el rostro de Louis.
"Estoy de vuelta, gatito"