Impulso (EdgarxYelo)

340 29 2
                                    


El cansancio ya se veía en los integrantes del GOTH, tras el Live de cinco horas por el aniversario de la pagina, muchos ya habían caído rendidos por el sueño, como el Bestia que yacía tirado en el patio, el Nico pidió que alguien lo entrara para que no se resfriara haya afuera y luego de un democrático cachipun, Pesho se vio obligado a arrastrarlo hasta la casa, mientras tanto Holyfuu guió a Edgar y Yelo hasta un pasillo en el que había un armario de donde el dueño de casa saco unos cojines y unas mantas.


- Tomen, pa que se tiren al piso.

- Weon aquí solo hay una manta - Dijo el Yolen.

- Es que no me quedan más po, aun debo pasarle una al Pesho y otra pal Bestia - justo en ese momento apareció el Pesho.

- ¿Que wea están haciendo?

- Toma una para ti y otra para el Bestia - el Nico le tendió dos mantas, el Pesho asintió y se retiro al comedor.

- Oye y ¿Por que a él le pasai pa que duerman separados? - Pregunto el Edgar.

- No creo que nadie quiera irse a dormir al lado del Panes en esas condiciones - Todos hicieron un ruido de aprobación - Ya weon, ahora solo me falta el Jaime ¿Donde estará?

- Creo que se fue pa tu pieza - le contesto el Manuel.

- Puta el maricon... ya, ahí veré que hago con él. Buenas noches cabros - con eso el Nico se fue hasta las escaleras y subió por ellas dejando solos Edgar y Yelo.

La pareja camino de nuevo hacia el comedor, en el piso estaba tirado el Bestia apoyado en uno de sus hombros y con una manta en cima, por otro lado, se encontraba el Pesho quien se había acomodado en todo el sillón.

- Ya weon al piso no ma - dijo cansado el Eddiflin.

Lanzaron los cojines que les había pasado Nicolas al suelo y se sentaron para acomodar la única manta que tenían, el Yelo se quedo mirando al de rulos, una risa se le escapo al notar que todavía tenia cerveza en el bigote.

- Weon, todavia teni sucio el bigote.

- Que wea - Edgar se paso la lengua por un costado, efectivamente, seguía teniendo alcohol.

- ¿A que sabra?

- A cerveza po.

- Quiero probar - Sin previo aviso se acerco a la cara de el ruliento, lamió su bigote para luego bajar hasta su boca y plantar un beso en ella.

El más alto se quedo petrificado ante la acción de su amigo, no sabia como reaccionar o que hacer, sintió como los labio de Manuel se movían invitandolo a participar, pudo haber sido el alcohol, pudo ser la emoción del momento, pero el Edgar correspondió el beso, le agarro la cintura a Yolen y lo atrajo hacia él haciendo que casi se sentara en cima suyo, el Yelo cruzo sus brazos por el cuello de Eddifiln, así profundizando el beso. Las manos de el más alto comenzaron a subir por los costados de su amigo, causando que este se quejara.

El pequeño momento de pasión duro poco, ya que fue interrumpido cuando escucharon un sonido, se separaron rápidamente, sin embargo permanecieron en la misma posición, el sonido se volvió a escuchar; era un ronquido de Bestia; ambos suspiraron aliviados ya que no habían sido descubiertos, se miraron y se sonrojaron fuertemente al notar como estaban, se apartaron rápidamente sin decir ninguna palabra, se acomodaron y se durmieron.

Al dia siguiente, tampoco hubo mucha conversación, el único cruce de palabras que hubo fue un "Hasta luego" que se dijeron al salir de la casa del Holyfencio; todos andaban con la misma actitud.

Con el correr del fin de semana, los pensamientos de el Edgar acerca de su amigo se enredaban más y más, llegando al punto en que no sabia que sentía hacia su amigo, " y si ¿En verdad me quiere? o si ¿Solo fue culpa del trago?", preguntas que rondaban por su cabeza y que solo le hacían recordar el beso de aquella noche, su corazón revoloteaba con solo pensar en ello.

Finalmente el llego el Lunes. Edgar se despertó somnoliento, no tenia muchas ganas de levantarse temprano, pero debía hacerlo para ir a la universidad. Solo le basto moverse un poco para notar que estaba duro, de inmediato una serie de pequeños recuerdos acerca de su sueño llegaron a él y en todos ellos estaba Yelo, se enderezo lentamente en la cama.

-¿ Que voy a hacer? voy a verlo hoy dia si o si - susurro el de rulos - No vale la pena quedarme aquí pensando - se levanto cuidadosamente para irse a la ducha, necesitaría un baño bien frío para andar atento a lo que el dia le preparara.

Llegando a la universidad, no hubo un gran intercambio de palabras, el grupo de seis no parecía tener ganas de crear conversación alguna, los únicos animados eran Jaime y Nico, quienes extrañamente, andaban muy unidos, Holy le coqueteaba en casi todo momento al Alfredo, incluso, el barbón le agarro un par de veces la nalga a su compañero. Esta situación extraño un poco a sus amigos, por lo general, Jaime se hubiese alejado de su amigo o le habría dicho un par de chuchadas, pero no fue así.

Para alivio del Edgar, esto le ayudo a despejar la pequeña tensión que había entre él y Manuel quien se alejaba cada vez que podía de el ruliento. Para la hora de almuerzo, Oscar no pudo aguantar más la duda de que le pasaba a Jaime y Nicolas, por lo que fue directo al grano.

- Yo puedo ser muy volado, pero ¿En que andan? - se dirigió a la pareja - han andado mariconiandose todo el dia.

- ¿Que tiene de malo, weon? - le contesto el Holyfuuu.

- Es que es raro que el Jaime no se enoje por eso - dijo el Pesho.

- ¡Es necesario que siempre ande enojao, weon!

- Ya me estabai asustando - dijo el Edgar entre risas.

-¿Y que hay de ustedes? - pregunto con enojo el barbón - El Edgar y el Yelo andan como a diez metros de distancia el uno de el otro mientras el Bestia y el Pesho no se separan ni por si a caso - los nombrados se miraron nerviosos entre ellos.

- Ya si todos andamos raros, weon, no hay porque enojarse - dijo el Nico mientras pasaba su brazo por el hombro del Jaime - Mejor vamos a comer algo, estoy cagao de hambre - todos concordaron en lo mismo y se dirigieron a buscar algo de comer.

Yolen aprovecho que todos se habían calmado y le agarro el hombro a Edgar para que se detuviese, este se dio vuelta y le presto atención a su amigo.

- Oye, emm... ¿no te tinca venir a mi casa hoy? ahí jugamos algo, no sé - dijo Manuel mientras se rascaba la nuca.

- Bueno - le contesto con una sonrisa.

No hubo más cruce de palabra entre ellos hasta el final de las clases, después de ello se juntaron para ir a la casa de Yelo. En el camino la platica no fue más allá de los juegos o de lo cansados que estaban. Finalmente llegaron a la casa de Manuel, la cual parecía estar vacía.

- Mi familia no va a llegar hasta bien tarde así que vamos a estar solos.

El corazón del Edgar se acelero a medida que se formaban situaciones en su cabeza en que tanto él como su amigo acababan besandose o en algo más. Negó con la cabeza, tratando de olvidar todas las imágenes mentales que se habían formado en su mente.

El dueño de casa guío al de rulos hasta el comedor, lo invito a sentarse mientras él encendía la consola, Edgar se sentó en un extremo del sofá y Yelo en la otra, ambos tomaron el control para jugar. Después de un par de minutos el juego se inicio; era de lucha; cada uno escogió un personaje y comenzaron a luchar. La atmósfera era tensa mientras jugaban, ninguno dijo nada, esto solo hacia que Edgar se preguntase para que lo invito, obviamente no era para jugar, o tal vez si, pero ese no era el principal motivo, algo le decía que Yelo lo había invitado para hablar a solas el tema del beso. Después de un rato de juego, Manuel suspiro y tomo la palabra.

- Oye ¿No estas molesto por lo del beso?¿O si?

- No, weon - Yolen sonrió aliviado y se acerco más a su amigo.

- ¿Te imaginas si nos hubiesen visto? - se acerco un poco más al Edgar.

- Nos hubiesen webiado por el resto de nuestras vidas - el de rulos tambien se aproximo a su amigo.

- Bueno... ¿Aquí nadie nos va a ver? - dijo Yolen en un tono sugerente. Edgar se giro rápidamente a ver la cara de su amigo quien tenia una mirada juguetona.

No había que ser un genio para saber que el Yelo se le estaba insinuando, las mejillas del Edgar se pusieron coloradas, su pulso se disparo, por un momento se quedo mirando a su amigo quien hacia como que seguía jugando despreocupadamente.No lo pensó mucho, en un rápido movimiento, Eddiesick tomo la cara de Manuel entre sus manos y sello sus labios, el otro boto el control al piso de inmediato para así aferrarse al cuello de el más alto, poco a poco, Edgar empezó a tumbar al Yolen en el sillón hasta que quedo en cima de él.

Los dedos de el más bajo comenzaron a jugar con el largo pelo de Edgar mientras este escabullía sus manos por adentro de la polera de su amigo, Manuel comenzó a morder el labio de Edgar para que le dejase pasar, este accedió rápidamente, ambas lenguas se encontraron y empezaron a luchar por el dominio, a la vez, exploraban la boca de el otro. El de rulos llego hasta los pezones duros de el más bajo y comenzó a juguetear con ellos, provocando que Manuel gimiera en la boca de su amigo.

Eddiesick movió su boca hasta el cuello de Yelo, empezó a lamer lentamente cada parte que estaba al descubierto, se detuvo en un lugar cerca de la clavícula, ahí comenzó a mordisquear hasta dejar una marca roja.

- No me deji marcao po, weon.

- Ya es tarde - levanto el rostro y planto un beso en la mejilla de su compañero - Es para que vean que eres mío - hubo un momento de silencio en que la mirada de ambos se cruzaron- Weon... yo... Te amo - Manuel sonrió dulcemente.

- Cuando me ponía fleto con tigo, no era en broma... Tambien te amo, weon - el más bajo agarro la cara de el otro y planto un apasionado beso en sus labios.

Ambos se abrazaron fuertemente mientras sus lenguas danzaban en la boca del otro, Eddiesick agarro la polera de su amigo y comenzó a tirar de ella para poder sacarsela, Yelo se enderezo para facilitar la acción de su amante, aprovecho tambien de sacarle la camisa que llevaba Edgar y así emprender rumbo a través del cuerpo de su amigo.

Poco a poco las manos de Edgar se acercaron hasta la orilla del pantalón de Yolen, ahí se detuvieron un momento, lo pensó un poco, pero finalmente empezó a desabrochar el botón y bajar la cremallera, deslizo los pantalones hasta las rodillas al igual que los calzoncillos, dejando al descubierto el miembro duro de su compañero, Manuel intento hacer lo mismo, pero estaba tan abrumado por las sensaciones que sus manos temblaban, haciendo más difícil la tarea. Edgar noto las intenciones de su amigo por lo que él mismo se desabrocho sus pantalones y se bajo todo hasta por debajo de la rodilla.

Edgar comenzó a tocar el miembro duro de su compañero, suavemente con la yema de sus dedos, Manuel se estremeció y gimió en voz alta el nombre de amante, esto solo hizo que el de rulos moviera su mano más rápido, la respiración de el más bajo se volvió agitada, su cuerpo comenzó a tiritar a medida que sentía que llegaba a su limite, no podía seguir soportando por más tiempo, movió su mano y agarro la muñeca de Edgar .

- No sigai ... quiero durar hasta el final - pronuncio entre jadeos. El ruliento asintió, dejo de mover su mano, abrió las piernas de su amigo para el siguiente movimiento, pero una duda le llego de repente.

- Oye ¿Como lo vamos a hacer?

- ¿Nunca hay visto porno gay?

- Si cacho como se hace, pero ¿No necesitamos lubricante o algo así?

- Teni razon... pero no tengo, weon, no es que estuviese preparado para la ocasión - ambos se quedaron pensando por un momento, de pronto a Eddieflin se le ocurrió algo, se llevo dos dedos a su boca y comenzó a lamerlos.

Cuando vio que estaban lo suficiente húmedos, acerco uno a la entrada de su amante y lo introdujo cuidadosamente, Manuel arqueo la espalda ante la rara sensación, suspirando fuertemente. Edgar comenzó a mover su dedo para así dilatar el orificio, entrando y saliendo de el, después de un rato un segundo dedo fue introducido, causando un ronco gemido de placer de Yelo, el de rulos se deleitaba viendo las expresiones que ponía su amigo cada vez que movía sus dedos.

- Ngh... Edgar~ ...creo que... que estoy listo - El nombrado saco sus dedos y acomodo su miembro en la entrada de su amigo.

- ¿Estay seguro de esto?

- Si...dale no más.

Lentamente el miembro de Edgar entro en el orificio de su amigo, hasta quedar totalmente cubierto, Yelo se aferro a los cojines del sillón tratando de resistir el dolor que sentia.

- Ohh... weon... eri muy grande... espera a que me acostumbre - el de rulos asintió y espero hasta que su amigo le hizo una señal para que se empezara a mover.

Los movimientos fueron lentos al principio, pero poco a poco la velocidad de las estocadas aumento, el sudor pelaba sus cuerpos, los gemidos llenaron el comedor. Edgar subió una de las piernas de su amigo hasta su hombro para así poder entrar más profundo en él, en un momento logro tocar un punto dentro de Manuel que hizo que este se estremeciera y gimiera más fuerte, el de rulos se acomodo para volver a tocar ese lugar.

Juntaron sus frentes mientras sentían llegar el clímax. Los dos se vinieron gimiendo el nombre de el otro, Manuel se agarro fuertemente de la espalda de Edgar mientras desparramaba su semilla en el vientre de ambos. El de rulos salió de su amigo y se tumbo en cima de él, tratando de recuperar el aliento, de pronto, Yelo se comenzó a reír débilmente, su amante lo miro confundido.

- ¿Que pasa?

- Es que... Estamos cubiertos de chelen~ - pronuncio con un tono de voz distinto, esto provoco la risa de Edgar.

- Mejor amo a ducharnos antes de que llegue alguien.

- ¿Pa sacarnos el olor a Chelen? ~ - el de rulos se comenzó a reír más fuerte.

- Si weon.

- ¿Juntitos? - Edgar le dio un beso en la frente a Manuel en respuesta.  

Despues del especial (MultiParing)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora