Despues del especial (MultiParing)

Te tenia ganas (PeshoxBestia)

Justo le tenia que tocar a él. Pesho se quejo mientras caminaba hacia el patio donde se encontraba tirado de espaldas Bestia Negra quien estaba inconsciente, probablemente por el alcohol y el cansancio. Alexander miro por unos momento a su amigo, se quedo pensando en como lo movería, probablemente pesaba mucho más que él, pero no se pierde nada intentando, se agacho y agarro uno de los brazos de su amigo, lo paso por sus hombros e intento pararse, no pudo hacer mucho, el peso muerto de su amigo era demasiado para él solo. Puteo mentalmente a los demás por dejarlo solo haciendo esto.

Nuevamente, intento parar se, pero no logro nada, en un ultimo intento ejerció toda la fuerza posible, para ayudarse, uno de sus brazos se coloco en la cintura de Bestia para así tratar de leventar lo más fácil, poco a poco logro ponerse completamente derecho con su amigo colgando a un lado, aun así, su cuerpo comenzó a temblar por el exceso de peso.

- Bestia despierta po - el nombrado no se inmuto ante el llamado de su amigo - ¡Weon despierta! - el otro parecía no estar escuchando - ¡Conchetumare, Oscar, despierta aweonao! - Lentamente se abrieron los párpados de Bestia, inmediatamente se estabilizo en el piso, pero se ladeo un poco hacia el lado contrario de su compañero, haciendo que ambos se movieran en esa dirección - Afirmare weon.

- ¿Que wea pasa? se esta moviendo el piso.

- Parece que estuvo muy weno el carrete - se burlo Pesho - mejor ayudame a llevarte pa dentro.

- Que eri lindo weon - su cabeza se apoyo en el hombro de el otro - Si tu eri mi mejor amigo, weon..

- Ya no te pongai sentimental y camina - las mejillas de Alexander se tornaron rosadas al sentir la pesada respiración de su amigo en el cuello.

No hace mucho tiempo, Pesho, había llegado a la conclusión de que sentía algo hacia su amigo drogadicto. Todo comenzó cuando empezó a sentirse extrañamente feliz al lado de este, luego vinieron los nervios, las sensaciones raras en el estomago hasta finalmente llegar a los sueños húmedos, esto ultimo, fue prueba suficiente para llegar determinar que estaba enamorado de Panes.

La nariz de Oscar comenzó a rozar el cuello de Pesho delicadamente, luego su rostro subió hasta la oreja de este y mordisqueo el lóbulo, Alexander tuvo que usar toda su fuerza de voluntad para no soltar un gemido y a la vez, mantener a su amigo de pie.

- Weon yapo para, nos vamos a caer - con cada gesto de Bestia, las mejillas de Pesho ardían más.

- Te voy a chupar entero, weon.

- El que va a terminar chupado entero vai a ser vo si no parai.

- No te pongai así... - en ese momento, Pesho soltó a su amigo y lo dejo en el piso de el comedor, pero no vio venir que este le agarraría el brazo haciendo que cayese en cima de Bestia, este soltó una risa .

- Te amo, weon - las manos del drogadicto se movieron hasta el cuello de su amigo. Por la cabeza de Alexander corrieron miles de pensamientos, entre todos ellos, el más acertado para él era "Esta borracho...muy borracho y volao". Oscar comenzó a hacer presión en el cuello de su amigo para así acercar a Pesho a su cara. Sus narices se rozaban. Los ojos de Pesho se juntaron con los de Bestia, y a pesar de estar un poco rojos; probablemente por fumar; aun podía distinguir un pequeño brillo de amor.

"Hay que aprovechar no ma" pensó Alexander como sus labios se sellaron con los de Oscar, rápidamente el beso subió de tono, sus lenguas luchaban por el dominio en sus bocas, los dedos de Panes se enredaron en el cabello corto de su amigo y se aferraron con pasión. El corazón de Pesho se acelero al igual que el de su compañero. El aire se les hizo escaso por lo que se separaron para recuperar el aliento, sus ojos se volvieron a encontrar, una pequeña sonrisa apareció en los labios de Bestia quien tenia las mejillas ligeramente rosadas.

- Mejor voy a buscar...algo para...taparnos - dijo Pesho tratando de recuperar el aliento. Se levanto rápidamente, pero antes de que pudiese irse, Panes le agarro el brazo.

- ¿Vai a dormir a mi lado, weon?

- No, weon, van a sospechar - En su mente se repetía "Este weon esta borracho, mañana no se va a acordar de niuna wea" sabia bien que eso era cierto, por lo que no quiso tentar su buena suerte, prefería dormir separado de su amado y hacer como que nada paso a despertar al lado de este y escuchar un "Maricon culiao".

- Entonces mañana ven a mi casa po, ahí nadie nos va ver - dijo mientras lo soltaba.

-Ya, mañana vamo pa tu casa - pronuncio Alexander sin mucha importancia mientras se movía por el pasillo en busca de Nico.

Trato de aparentar normalidad aunque por dentro estuviese totalmente confuso. Cuando encontró a el dueño de casa, este estaba hablando con Edgar y Yelo, pregunto que pasaba, nadie le contesto pero Nicolas le extendió dos mantas para él y su amigo, a penas las tuvo en su poder, se retiro sin mucho ajetreo de vuelta al comedor donde Oscar ya se había quedado dormido, una débil sonrisa apareció en el rostro de Pesho al ver a su amado dormir plácidamente, lo tapo con una de las mantas que tenia, con la otra, se dirigió al sillón y se acomodo.

"Mañana no va a recordar niuna wea" pensó Alexander mientras trataba de encontrar una posición cómoda.

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El ambiente entre los integrantes del GOTH estaba tenso a la mañana siguiente, ninguno parecía hablarse o querer mirarse a los ojos. Nicolas no les ofreció desayuno por lo que apenas despertaron todos salieron de la casa.

Pesho se fue en dirección a tomar la micro para irse a su casa, saco sus audífonos de los bolsillos del pantalón, los desenredó, pero antes de que pudiera colocarse los, una mano le agarro el hombro, se dio vuelta y encontró a Oscar respirando agitadamente.

- Conchetumare... esperame po.

- Que estay mal, weon - dijo Pesho mientras veía que su amigo se apoyaba en sus rodillas tratando de recuperar el preciado aire.

- Si me tuve que venir *cof cof* corriendo detra de vo.

- Que hace mal la droga - se burlo.

- Si andai por la mismas gil culiao - contesto con enojo.

- En todo caso y ¿Por que te tenia que esperar, weon?

- ¿No te acordai de lo que hablamo anoche?

- ¿Que cosa po weon?

- Que vinierai pa mi casa - Alexander se quedo en shock por un momento, "¡Este gil se acuerda de anoche!" , el rubor subió por su cara.

-Crei que estabai borracho o volao...

-Na que ver, estaba terrible de lucido ¿Y vo?

- Tambien po.

- Entonces - le agarra el brazo - Vamo pa mi casa.

No era necesario ser un genio para saber por que Bestia Negra había llevado a su amigo hasta su casa.

Ambos se encontraban en la habitación de Oscar tirados sobre la cama. Alexander estaba cernido sobre su amigo besando su boca con pasión, degustando el sabor que esta tenia, sus manos comenzaron a colarse por debajo de la polera hasta llegar a los pezones de Panes

- Tu pesho~ - los peñisco haciendo que el de abajo gimiera en el beso - Mejor te saco esta wea - empezó a tirar de el poleron rojo que llevaba Oscar- Weon ayudame po.

-Ya, si ya te ayudo, weon - El drogadicto se sento y comenzó a sacarse la ropa, los ojos de Alexander se quedaron fijos sobre su amante a medida que este se iba sacando sus prendas.

- Aprovecha de sacarte los pantalones - dijo casi por inercia, seguía embobado con el cuerpo de Bestia.

- Que andai apurao weon.

- Es que te tenia ganas hace tanto tiempo, weon - rápidamente se abalanzo sobre su amante, empujando lo contra la cama.

- Conchetumare, el weon ansio...ahhhhh~ - Alexander comenzó chupar con fuerzas uno de los pezones de Panes, mientras tanto, una de sus manos se deslizo por dentro de el pantalón hasta toparse con el miembro de su amante, lo agarro firmemente haciendo que otro gemido se escapara de Oscar.

- Que sonai bonito - su boca se movió hasta el otro pezón y lo lamió con el mismo entusiasmo con el que había lamido el anterior.

La mano libre de Alexander fue hasta el pantalón de Bestia y con gran habilidad desabrocho los botones, luego ambas manos agarraron el jeans y los calzoncillos y con un brusco movimiento bajo ambas prendas hasta las rodillas de se compañero, dejando así en libertad el duro miembro de Oscar.

- Sacate vo tambien la ropa - se quejo Bestia - Yo tambien te quiero toquetear - agarro la polera de Pesho y la empezó a tirar hacia arriba.

- Ya, weon, esperate - Bestia se volvió a sentar con rapidez y le saco la polera de un tirón a Alexander.

- Yo tambien ando apurao - le sonrió maliciosamente.

- Te iba a bailar sensual, me cortaste la onda - le dijo casi en un puchero.

- Ven pa ca, weon - agarro por los hombros desnudos a Pesho y lo acerco hasta que estuviera en cima suyo de nuevo, lentamente junto sus caras para sellar sus labios en un tierno beso. Con la misma lentitud sus manos bajaron por los costados hasta toparse con los jeans de su compañero, con la punta de sus dedos recorrió la orilla de este hasta toparse con los botones, los desabrocho uno por uno. Alexander noto las intenciones de su amigo y en un dos por tres, tanto los pantalones como los calzoncillos ya no estaban, tambien aprovecho de sacar por completo las prendas que aun yacían en las rodillas de Bestia.

- Que eri lindo weon - con una mano agarro ambos miembros, la deslizo de arriba hacia abajo haciendo que ambos soltasen gemidos - nhg~ ¿Teni lubricante?

- En el...ahhh... cajón - la mano de Alexander busco a torpemente en el mueble hasta toparse con el tubo.

- ¿Por que chucha teni esto?

- Siempre listo po weon - Pesho se reía mientras en dos dedos se echaba del liquido.

Sus bocas se juntaron en un acalorado beso mientras los dedos de Alexander entraban y salían de la parte posterior de Bestia, este se quejaba cada vez más fuerte. No paso mucho hasta que Oscar hizo una señal de que estaba listo. Pesho alineo su miembro y con ansias entro de lleno en su amigo.

- Calmate, gil culiao.

- Tambien te amo, weon - una de sus manos agarro a las caderas de Bestia, la otra se fue hasta la cabeza de su amante, donde sus dedos se enredaron con el cabello oscuro. Con movimientos fuertes y rápidos, Alexander comenzó menearse contra su amigo.

- Conchetumare...Ahhh~ - Los brazos de Bestia se enroscaron en el cuello de Pesho y lo trajo bruscamente hacia él haciendo que sus frentes chocaran. Por sus cuerpos corrían las gotas de sudor, sus mejillas brillaban de color rojo. Por la cara de Alexander se formaba una sonrisa, los roncos y graves gemidos de su amante eran como música para sus oídos. Las paredes internas de Oscar se comenzaron a apretar; estaba llegando a su limite. Finalmente el clímax llego para ambos al mismo tiempo. Se quedaron en esa posición por un tiempo hasta que Pesho salió del interior de su amante y se tendió a su lado.

- Oh la wea wena - pronuncio Bestia - Es mejor que un pito.

- En to caso.

- ¿Como sera estar drogao y hacerlo?

- Pa otra ocasión - Alexander comenzó a reír se débilmente mientras se acomodaba cerca de su amante.

-Oye, y ¿Que amo a hacer en la U ?

- Disimular yo creo...¿Te puedo toquetear en clases?

- Callate aweonao - le pego en la cabeza a Pesho.