Años Dementes

El comienzo de todo...

Secundaria oh la secundaria te va a encantar decían, estar en secundaria es lo mejor decían, pero nunca dijeron que iba a ser tan complicada...!
Mi nombre es Katlyn Salvat y hoy empiezo mi nuevo año escolar, claro no me parece algo emocionante por varios motivos; mismo colegio, mismos compañeros, mismos profesores, en fin la rutina de siempre.
Quisiera saber que se siente ser nueva en un colegio pero creo que jamás sentiré esa sensación primero viajo a la luna antes que eso... En este año espero encontrar a alguien nuevo con quien poder dialogar y compartir los mismos gustos o quizás diferentes, el destino es incierto no sabemos con quienes nos podemos encontrar, puede que encontremos a alguien que ni nos imaginemos que algún podríamos entablar una amistad, o una relación amorosa, o quizás no, podríamos encontrar a ese alguien que solo nos viene a lastimar, a quitarnos lo poco que tenemos pero muy valioso como son los amigos, o quizás no. Esta vida es una porquería pero eso es parte de su encanto. Si la vida fuera fácil, no estaríamos  tan orgullosos de lo que hemos logrado.
Me levanté como de costumbre, sin ninguna luz en mi ventana, sí queridos amigos Katlyn Salvat no tiene ventana, ni luz solar que la levante por las mañanas, lo sé soy tan afortunada...ya Katlyn deja de hablar con tu conciencia que ni ella quiere hablar contigo...me he levantado gracias a la encantadora voz de mi madre, algún día grabaré su voz y la pondré como alarma, me dirigí a la ducha y órale estaba helada el agua, pero aceptable, me cepillé los dientes y salí del baño, continué hacia mi cuarto y me dirigí a mi ropero donde se encontraba mi "hermoso uniforme" *Nótese el gran sarcasmo...me vestí, me deje el cabello suelto como de costumbre, mi mirada chocó con el espejo y me vi, ahí estaba yo una chica de estatura pequeña, de tes blanca, unos cachetes tan pero tan redonditos que parecen dos pancitos de dulce, ojos color miel, cabello castaño oscuro, largo y lacio, y sí esa era yo, sin ninguna pizca de maquillaje, no me gustaba nada de eso, ni maquillajes, ni vestidos, ni peinarme, ni modelaje, ni el color rosado, creo que fue por la crianza con mis primos, luego me dirigí hacia el comedor allí se encontraba mi amado padre, mi encantador chef con un plato de patacones y batido de fresa, comí con tanto gusto, al parecer mi día comenzaba extraordinario, regresé a mi cuarto porque olvidé lo primordial, mi mochila, no tenía arreglado nada, genial iba a llegar tarde pero claro igual me dejarán entrar porque mi madre es la profesora.
Sí mi hermosa madre llamada Scarlet Fey es profesora en mi colegio, y mi padre un ingeniero industrial y trabajador independiente involucrado en el negocio de Omnilife. Los 3 vivimos en una casa muy acogedora construida por mi abuelo Que descanse en paz y mi padre.
Salgo de mi casa y agarro el bus como siempre, como salimos tarde el bus venía lleno, por lo tanto vinimos muy apretadas aguantando olores desagradables por todo el trayecto...hasta que llegamos al colegio.
Saludé a los maestros, miré hacia al rededor y no encontré a alguien nuevo, quizás este año no sea tan divertido.
Entro a mi curso, y todo sigue igual, yo sentada en la primera banca como siempre antisocial y lame botas del profesor, nada ha cambiado, hasta que tocan el timbre y las clases comienzan.
-Baia baia alguien nuevo, otro nuevo y otro; ohh deos creo que me va a gustar este año.
-Que tanto miras niña? ...Me dice uno de los muchachos nuevos; yo me limito a girar mi cabeza y ver el pizarrón.
Han llegado 3 chicas nuevas y 2 chicos nuevos y el idiota que me habló, espero que sean buena onda... A excepción del idiota, él no creo que sea buena onda por como me habló....Salgo de mis pensamientos cuando escucho a la maestra Karol Mortensen una adulta de unos 32 años, alta, cuerpo esbelto, quizás va al gym, rubia, ojos grises, muchos de mis compañeros babean por ella, supongo que es la maestra que todos los chicos quisieran tener en sus colegios, ella es super amable, muy encantadora pero lamentablemente para los muchachos y algunos profesores ella está casada, lleva ya dos años trabajando aquí y tiene a su hija en mi curso, y claro se parece a la madre, su nombre es Mary, la mas hermosa del curso, alta, blanca, ojos avellana, rubia y delgada, lo mejor, es buena amiga y no es creída por eso me cae bien y además no le para bola a cualquiera...Miss Karol interrumpe mis pensamientos, diciéndome que escriba la fecha en el pizarrón mientras mis compañeros se presentaban y los nuevos también.
-Necesito que todos los alumnos se levanten y se presenten; digan cuáles son sus nombres, cuántos años tienen, de qué escuela vienen, y que objetivo tienen este nuevo año.
Cada uno se levantó de sus asientos y comenzaron a presentarse escuche a dos o tres y no recuerdo que más pasó... Me levanté en una de las bancas del laboratorio, no se que me ocurrió.
-Que pasó? ~le pregunte a un muchacho que estaba a lado mío, alto, bronceado, cabello castaño claro con un corte al estilo Justin Bieber, ojos color entre Hazel y avellana, no se veía nada mal, la verdad estaba muy guapo, pero que hacía aquí?, ahora que recuerdo es el que me dijo en clase, Que tanto miras niña? Ay que desagradable.
-Te desmayaste mientras estabas en el pizarrón.
-Que? Y quién me trajo acá?~le pregunté
-Yo, por algo estoy aquí no?
-Pero ni siquiera te conozco, ni me conoces.
-Bien dicho Katlyn Salvat.
-Espera; como carajos sabes mi nombre?
-Tengo mis contactos, además la mayoría te conoce, has estado aquí toda tu vida.
-Claro, tiene sentido, y pues gracias por ayudarme.
-De nada niña.
-Espera... Dime tu nom....
Lo dije demasiado tarde y en voz muy baja, el idiota ya se había ido, por qué de tantos muchachos que hay en mi curso, tuvo que ayudarme él?
~Y yo que pensé que este día iba a ser de lo mas normal, por que me habré desmayado? La impresión? Menopausia? Nah eso de ley que no; Hambre? Sueño? Bueno muchas preguntas en fin fue solo un desmayo.
Llega la hora de recreo y bajo rápidamente al patio y oh que cabeza la mia, olvidé mi dinero en la maleta, me dirijo al salón y me encuentro con... Diablos no se el nombre.
-Hey, que tal? Disculpa cual es tu nombre?
-Que crees? Que por que te lleve a que te recostaras somos amigos? Sigue con tu vida yo hice lo que debía hacer.
-Pero... Ay esta bien como quieras, yo solo vine a ver mi dinero.
Fui hacia mi mochila y saqué mi monedero, bajé rápidamente las escaleras para poder alcanzar comida en el bar, pero llegué demasiado tarde, ya no había nada, ni la migaja de un pan, ni el sorbito de un jugo.
-Ten, no me comeré esto ~escuché una voz atrás mío.
-Oh pero miren quien me ofrece su lunch, el idiota antisocial y a parte de idiota, bipolar.
-Solo lo hago, porque no quiero que te desmayes de nuevo y tenga que cargarte otra vez, pesas como una ballena sabes?
Ahí fue el momento en el que mi mente se puso en blanco y solo caminé rápidamente hacia los baños; no quería hacerlo pero tenía que... Agarré mi cabello hacia atrás, coloque mis dos dedos de la mano derecha dentro de mi boca y los llevé hasta la faringe, lo cual provocó que salga el vómito, no quería volver a recaer, pero fue así.
Y sí, no todo en esta vida es perfecto, buenas notas, buenos padres, buen colegio, buenos maestros, y claro un trastorno alimenticio.