TODOS TENEMOS UNA HISTORIA SUICIDA

Erika

Entramos de nuevo al orfanato Y volvimos a poner la piedra en su lugar,detrás de nosotras venía una pequeña niña con lentes,muy linda un poco mas grande que nosotras, le preguntamos su nombre y nos dijo que se llamaba Erika.

Paso el tiempo Erika,Citlali y yo eramos inseparables. Cuando cumplí 7 años Erika y Citlali (que también había vivido en Canadá), me llevaron a comer una hamburguesa ya que su abuelo de Erika le había mandado dinero. Escapamos del orfanato sin saber que esa gran noche se volveria una pesadilla en el día.
Volvimos temprano como de cstumbre,pero las cuidadoras habían descubierto que nos habíamos escapado. Al verlas las preguntas invadieron mi cabeza ¿quien les dijo? ¿como se enteraron?, Detrás de una de las cuidadoras estaba Karen la típica niña que no tiene vida social y se encarga de destruir las demás, me miró y al verla tenia una sonrisa de ganadora, una sonrisa hipócrita.
No podía creer que en ese cuerpecito de tan solo 7 años hubiera tanta maldad. Las cuidadoras nos llevaron casi arrastrando de una oreja al cuarto. Ese cuarto del cual o salias muerta o demasiado traumada, creo que la primera opción hubiera sido la mas adecuada para nuestra situación.
Entramos al cuarto a empujones Citlali lloraba, yo contenía las lagrimas , Erika se hacia la fuerte para que no la viéramos llorar. Nos sentaron en una silla de fierro y nos amarraron, esto fue tan duro que al moverte sentías como es lazo quemaba y raspaba tu piel sin duda esa era lo tortura menos dolorosa, prendieron el horno (donde calentaban los fierros) y ese momento la opción de no salir con vida se hizo presente, metieron 3 fierros,veíamos como se calentaban y se ponían de un rojo vivo, que nos aterraba pensar que pudieran traspasar nuestra piel. Sacaron los fierros y entro una chica que nunca había visto y la directora Alba le dijo:

-Por fin llegas- lazo una sonrisa burlona- pensé que teníamos que seguir esperando a la pricesa- dijo sarcásticamente

-Pues ya vez que no, ya estoy aquí y eso es lo que cuenta ¿o no?- respondió ella muy seria

- ¿A quien quieres?- pregunto Alba-

- A la de lentes- contestó ella

-Perfecto- dijo ella mientras les repartía el fierro caliene, Cuando las 3 lo tuvieron en la mano comenzó a contar -¿ listas? 1... 2... 3... -

Los gritos de Citlali eran desgarradores, Erika comenzó a llorar y yo casi quedaba inconciente del dolor. Sentía como Traspasaba mi carne, un golpe, dos golpes , tres golpes y después de eso ya no sentía la espalda solo sentia un hormigueo horrible.

-Es suficiente- dijo Alba

-Un golpe mas y la dejare empaz- dijo la chica nueva.

Le dio el golpe, pero Erika ya no se movía sus lentes estaban tirados su cabeza hacia abajo. La empezaron a mover pero ella no respondía. Era lógico Erika ¡había muerto!

-¡LA MATARON!- grite con el poco aliento que me quedaba

Se fueron a discutir a una esquina del cuarto y cuando regresaron desamarraron a Erika y la tiraron cual costal de papas,

-Ella se quedara con ustedes, Por uno o dos días- dijo la nueva en un tono burlon - Ustedes estarán aquí una semana y tendrán que sobrevir con medio pan y medio vaso de agua al dia-

Salieron del cuarto y Citlali empezó a gritar y a llorar, trataba de soltarse para poder ver a Erika, pero se rindió al ver que el lazo había traspasado su piel

-Gracias por todo amiga mía- Citlali me escucho y continuo

- Fuiste de las mejores amigas que hemos tenido, nunca te olvidaremos.- después de escuchar eso me desmaye y no supe mas.