Días de Ben

Un día común

TC: Ben.

Iba cubierto con una chaqueta color marrón, con su capota cubriendo mí largo y liso cabello moreno del sol, unos pantalones un poco rotos y unas botas invernarías, justas para la época. Caminaba lentamente por la cera al extremo de la unión con la carretera, andaba en dirección hacía mí casa después de un largo rato de vagar por ahí con mis amigos, con el móvil en mí diestra, sin mirar por donde caminaba observaba su pantalla, en revisión de mis redes sociales. Luego de un rato de dar ligeros pasos, casi al rincón de la esquina donde se situaba el semáforo, de golpe choqué contra una chica, con un largo y liso cabello castaño, a dicha acción cayó dicha chica, entonces extendí mí mano hacía ella, con la intención de ayudarla.

"¿Estás bien?" exclamé.

 Sin una sola respuesta, la chica se levantó, recogió su bolso el cual cayó junto a ella a el choque, viéndome la cara, su expresión se tornó de un color rojizo y se alejó de mí dando largos y extensos pasos a una velocidad moderada, dando un breve murmullo seguí mí camino al semáforo encenderse en rojo.

Al llegar a mí destino. Mí casa, observé que las luces estaban apagadas

"Debió de irse recién mí madre", dije murmurando.

No tuve de otra que ir hacía la casa de Michael, mí mejor amigo en ese entonces, caminé unas 4 extensas cuadras hasta llegar a su casa, pasé por su reja, y al sonar el timbre en un instante me abrió, le expliqué el asunto, y me dejó entrar, poniéndome cómodo de una forma un poco grosera, me senté en la silla adelante de su ordenador, mientras que este se iba a la cocina a asear los platos.

Llamé a mí madre, después de un largo rato decidí quedarme a dormir en su casa, bajando a el primer piso después del llamado a la cena, me senté cómodamente, al instante llegaba a la cocina la misma chica a la que me encontré en la cera de la calle, me miró fijamente durando un instante, y desvió su mirada, sentándose en una silla delante mío, entonces fue cuando por el extremo posterior de mí cabeza escurría una gota larga de sudor, mis pupilas se dilataban lentamente, mí cara se enrojecía poco a poco, mis manos empezaron a temblar, mí babilla se retiraba por mí garganta, succioné mí manzana de adán, sentía un ligero sentimiento a...

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