Kris, chica de 16 años. Interesada desde su infancia por la danza.
Cursa en un centro de artes escénicas danza clásica y contemporánea. pero no es suficiente para ella, desea probar nuevos ritmos, nuevos estilos; por ello decide ingresar en un grupo...
Esta mañana se ha levantado lluviosa. Las clases no empiezan hasta el 12 de enero por lo que hoy tendría el día para mi libre disposición. Pero no es así del todo, ya que a las 11am debo estar totalmente lista ya que a las 11:30 hay una reunión para la iniciación al curso de danza contemporánea y clásica de la academia.
Me levanto de la cama con hábil saltito. Aunque haga un día abatido, tengo demasiadas ganas acumuladas por empezar en la MUR como para desperdiciar una mañana perreando en la cama.
Me dirijo hacia el cuarto de baño para seguidamente lavarme la cara y darme una ducha caliente y rápida. Una vez lista, bajo las escaleras para prepararme un buen desayuno de tostadas con aceite, un zumo de naranja y un plátano. No hay nadie en mi casa ya que mi padre ha ido a trabajar al turno de mañana y mi madre ha tenido que ir a una reunión que ha convocado el jefe de imprevisto.
Cuando me quiero dar cuenta ya son las 10:20, sé que aun tengo tiempo pero sabiendo como soy y la lentitud que tengo apegada a mi cuerpo es mejor que me ponga ya a prepararme.
Subo las escaleras y entro en mi cuarto, enciendo el ordenador y activo el reproductor de música. Suena ¨I shot the sheriff¨ de Bob Marley, un grande. Mientras tanto me coloco un sujetador deportivo morado de adidas y encima una camiseta con tonos corales bastante holgada, introduzco como puedo unos leggings negros con un toque azul en los bordes que quedan a la altura de la cadera en mis piernas. Me calzo mis zapatillas de deporte favoritas, meto los calentadores y las punteras en una mochila negra, cojo una sudadera abrigada y me dirijo a la puerta.
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Al cerrar, me encuentro con mi vecina Juliana; un mujer mayor pero siempre bien arreglada y siempre con una sonrisa preparada en el rostro. La verdad, una mujer encantadora.
- Buenos días Julia
-Buenos días Kris ¿ Puedo saber donde te diriges tan pronto un día de vacaciones ?
- Voy a la MUR- digo totalmente orgullosa.
- Vaya, me alegro de que al final puedas cumplir uno de tus sueños.
- Y yo...- digo casi gritando mientras me alejo corriendo. Ya son las 11:10 y de mi casa a la MUR hay 20 minutos aproximadamente andando, voy a tener que darme prisa o llegaré justa de tiempo.
Voy a paso rápido pero al mirar la hora en el reloj de mi muñeca me alarmo, seguramente llegue tarde; decido comenzar a correr, agarro la mochila negra con mis dos manos y empiezo a moverme más veloz. Corro tan decidida y rápido que no me doy cuenta de que alguien viene de frente con unos patines. Por lo visto él o ella tampoco se percata y finalmente acabamos chocando y cayendo al suelo ambos.
- Ten más cuidado- le digo a la persona que tengo en frente sin ni siquiera mirarla a la cara.
- Perdón...- Resulta que el torpe que ha chocado contra mí es un chico.
- No pasa nada ¿ estás bien ? - le digo mientras me levanto lo más rápido que puedo y me sacudo la ropa.
No me contesta, está más entretenido buscando una forma en la que levantarse. Por lo visto, no debe ser un patinador profesional.
-¿ te ayudo?- le ofrezco tendiéndole una mano.
Sin decir nada la acepta y finalmente terminamos ambos de pie.
- Muchas gracias. Espero que no te hayas hecho daño- me desea el chico de pelo rubio recogido en un pequeño moño.
- No ha sido nada. Bueno, me voy que tengo prisa.
Y sin mirarlo más me dirijo corriendo hacia la MUR.
