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    Era un martes 23 de febrero a eso de las 2:00 cuando decido pedirle permiso a mi madre para salir con mi novio, Alex. Él y yo llevábamos unos 9meses siendo novios. Se me había ido la regla hacía varias de horas y eracostumbre tener sexo el mismo día que se me fuera mi periodo ya que no habíaprobabilidades de quedar embarazada. El, no estaba estudiando pero aún tenía 20 años y no estaba preparado para tener un hijo. Y yo tenía 17,al contrario de él estaba en la universidad y trabajando y sabía que tampoco tenía mucho tiempo, ni demasiado dinero como para mantener un bebe. Cuando hablamos en la mañana le había propuesto que fuéramos al Motel El paraíso para yo "estudiar" (y si iba aestudiar pero sabía que terminaría en algo mas y el tambien lo sabia)


Entro a la cocina donde se encontraba mi madre, la miro y en cuanto me mira le digo –Mami, puedo ir a la universidad a una actividad que necesito ir ya que me darán una nota por asistir?- ella me mira y solo responde –no llegues tarde-

La miro y mientras sonrío le digo –Alex me acompañara y vendrá a buscarme en una hora.-



Corro a mi cuarto y cambio mi ropa rápido. Pongo un pantalón Mahón largo, una blusa negra con elefantes blancos y unas sandalias de color oro y me maquillo un poco para que parezca que voy a la universidad de verdad.(Si habia entrado a la universidad antes de mis 18 porque mi madre me habia puesto en el kinder cuando a penas tenia 4).

Una hora después llega Alex, tiene un pantalón crema y una t-shirt azul cielo con unos tenis Nike. Lo miro, le doy un beso y un abrazo y entro al coche luego de que el haga lo mismo.

Cuando llegamos a El Paraíso, quito mis sandalias al entrar a la habitación y me tiro en la cama con mi libro de ciencia animal y empiezo a estudiar con Alex. El me hacía preguntas y yo las contestaba para así demostrarle que había estudiado y me sabia bastante el material del examen.




Unas horas después...

Ya habíamos acabado nuestro juego ya que cuando llegamos al motel habíamos quedado en que por cada pregunta con respuesta acertada, el me daría un beso. Así que era hora de los besos. El empieza a darme besos en el cuello mientras yo pongo mis manos alrededor de su cuello y termino encima de su cuerpo. Lentamente quito su pantalón mientras nos besamos y el sube mi blusa. Lo demás se los dejo a su imaginación.


Después de dos horas, nos encontramos sentados en la ducha, sentados en el suelo y dejando que el agua caiga sobre nuestros cuerpos. Yo juego con el agua como si fuera una niña y el me observa.


-Eres tan bella- dice, mientras me mira. –Nunca me había sentido tan cómodo con alguien. Mira donde estoy ahora mismo. Sentado completamente desnudo en la ducha con mi novia como si la conociera de años- dice mientras juega con mis manos.


Yo solo lo miro y le sonrío. Él era perfecto para mí, todo lo que yo siempre había buscado. Una persona que estuviera ahí todo el tiempo para mí. Aunque habíamos tenido nuestras peleas, siempre terminábamos buscándonos la vuelta, tratando de reconciliarnos.


-Tú eres a quien más amo- digo y me acerco para darle un beso.


Cuando nos separamos, lo halo donde mí y le paso mi lengua por toda su cara.


El ríe y a la vez pone cara de asco –guacala, eres una puerca- mientras pasa su cachete por mi cuerpo para limpiar la baba que tiene en la cara.


Yo rio como loca y lo beso. El me responde al beso. Sus besos siempre han sido esos que te hacen sentir como en casa.

Al rato nos levantamos y terminamos en la cama ya vestidos para irnos. Miro la hora y luego observo como Alex duerme a mi lado y no paro de pensar en que sería de mí sin ese chico. Lo amaba tanto, o al menos eso sentía cada día.


Un agujero en ese cuadro rojoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora