Si mi voz muriera en tierra
llevadla al nivel del mar
y dejadla en la riberaLlevadla al nivel del mar
y nombradla capitana
de un blanco bajel de guerra.¡Oh mi voz condecorada
con la insignia marinera:
sobre el corazón un ancla
y sobre el ancla una estrella
y sobre la estrella el viento
y sobre el viento la vela!
Rafael Alberti