Ya habia pasado una semanas desde que empezaron las vacaciones de verano y seguia sintiendome realmente exahusto, la presion de los examenes, el tener que estudiar hasta tarde para asegurar una buena nota al dia siguiente nunca ha sido lo mio, terminaba mentalmente muy cansado y anhelaba tanto la llegada de las vacaciones que los dias parecian ser eternidades y ya que al fin habian llegado detestaba el no tener fuerzas suficientes para disfrutarlas como queria.
Tenia tantas expectativas y tantos planes para estas vacaciones que empezaba a dudar si me iba a alcanzar el timpo, era ya lunes por la tarde y permanecia tirado en la cama con la vista perdida en algun punto de la habitacion pensando en como habian sido mis vacaciones anteriores y el intento de mis amigos de que saliera a divertirme con ellos habia sido un cumpleto fracaso las fiestas con alcohol y chicas nunca han sido lo mio y ni hablar de amorios en eso habia sido un total desastre por igual, tenia esa mala cosumbre de entragarme por completo y al final siempre terminaba recogiendo los pedazos que habian quedado de mi corazon destrozado.
Era muy deprimente pensar en el amor, esas chicas valientes y dispuestas a amar incondicionalmente no parecian tener intencion de salir de los libros, habia perdido ya la esperanzas a pesar de que todos dicen que es lo ultimo que se pierde; supongo entonces que ya habia llegado al final de mi, el amor en estos instantes no parece mas que pura ficcion.
Me encontraba tan sumergido en mis pensamientos que no note que habian pasado ya horas hasta que escuche la voz de mi madre desde el piso de abajo.
-Anthony baja, ya esta lista la cena.
-Ya voy mamá.
Esa noche me fui temprano a la cama esperando que al dia siguente tuviese mas animos para empezar las vacaciones como se debia.
Y asi fue, al dia siguiente me encontraba con muchos animos y el dia soleado hacia que el verano se sintiera cada vez mas real. Decidi que lo primero que queria hacer era visitar mi abuela a pesar de lo calurosa que estaba la tarde, la extra#aba mucho, solia visitarla a menudo y por la semana de examenes tenia dias sin verla.
Al llegar a su casa esta se encontraba tranquilamente descansando en en su sillon preferido de la terraza con la proporcion perfecta de luz y sombra.
Me encantaba pasar el tiempo con ella, tenia esas divertidas historias y ocurrencias que me hacian reir y alegraban mi dia sin importar cuan horrrible hubiese sido.
Al llegar, me recibio con su radiante sonrisa y esa mirada que solo ella sabia darme.
-Hola abuela, Como has estado?
- Muy bien hijo, que tal ha estado tu dia?
- pues ha estado un poco aburrido sabes...
Mientras conversaba con ella habia notado una cara nueva en la vecindad, aunque en aquel momento solo le vi de soslayo y no le preste mucha atencion me dejo bastante intrigado su persona.
En los dias siguientes que visitaba a mi abuela llegue a ver varias veces aquella cara nueva y la curiosidad de conocer y saber quien era esa chica se hacia cada vez mayor. Hasta que un dia decidi tomar valor y hablarle.
Ella iba caminando despacio un tanto distraida, por lo que aproveche para alcanzarle y caminar a su lado.
-Ho..Hola, como estas? - le salude vacilante, maldiciendo por dentro el temblor en mi voz.
-¡Hola! Muy bien gracias - me respondio con una sonrisa - y tu como estas?
-Estoy.. - Estando cerca de ella pude apreciarla mejor y entendi porque desde aquel dia me habia dejado tan intrigado; era poco mas bajita que yo e iba vestida con unos baqueros y una blusa que resaltaba su figura era una chica realmente presiosa; morena, su pelo liso caia hasta su cintura y resaltaba el color miel de sus grandes ojos como luna llena.
-Sii? - dijo sonrrojandose al notar que habia estado examinandola.
-Estoy Bien Gracias - le sonreí avergonzado por mi indiscrecion provocando que volviera a sonreir.
Se quedo con la vista perdida a lo lejos por unos segundos y le note algo nerviosa de repente.
-Disculpa, pero debo irme.
-e.. esta bien -conteste confundido por su actitud repentina.
-Nos vemos luego - me dijo con una hermosa sonrisa a modo de disculpa y apresuro el paso.
Me detuve a verla caminar hasta que desaparecio en la distancia.
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Amor Imprevisto
RomanceAnthony Drew era un chico timido y aislado que vivia en su mundo, aunque tenia amigos no solia salir de fiestas preferia estar en la comodidad de su habitacion con un buen libro y una taza de chocolate. A sus 17 años poseia ya una lista de amores fa...