In My Blood

Capítulo 2

Tras un desayuno aceptable empezamos a crear un nuevo plan. Al parecer, en el poco tiempo en el que John y yo nos fuimos a Felix se le ocurrió una muy buena idea por primera vez.

Esas ideas que se nos ocurren a nosotros los jóvenes, los que no están tan viejos como mamá, y los que no son muy jóvenes como Demian, esas ideas solo las ponemos en practica nosotros.

-¿Entonces?- pregunto.

-Tranquila querida- dice Felix -Estoy pensando.

-¿Acaso piensas?- pregunta Clark fingiendo sorpresa y conmoción.

-Muy chistosa- dice Felix.

-Ya déjense de sus mamadas y hagamos el plan ¿Sí?- digo molesta.

-Ya escucharon a la princesa- escucho que dice Jay desde su rama, por encima de nosotros.

-No me digas así- le ordeno.

-Si Jay, se más respetuoso con las damas- dice John.

-Callate- dice Jay lanzandole el corazón de una manzana a la cabeza.

John se levanta de inmediato y trepa el árbol.

-¡Espera!¡Piedad!- escucho que grita Jay y segundos después cae del árbol de espaldas, exhalando violentamente el aire.

Todos se ríen al verlo ahí retorciéndose como gusano mientras intenta jalar aire. John baja del árbol y se vuelve a sentar en donde estaba. Jay recobra la compostura un poco, lo suficiente para seguir hablando.

-Controla a tu novio Bea- dice y yo le dedico una mirada mortal.

-No es mi novio- digo.

-Pero te gustaría- dice Clark mordiéndose el labio -A mi sí.

-¡Concéntrense!- les grito.

-¡Ya sé!- grita Felix.

-¡¿Qué!?- le gritamos todos.

-Asaltemos el castillo- dice y yo resoplo.

-Necesitaríamos más ayuda y una mente maestra, y nuestra mente maestra ya murió- dice Jay. Me muevo un poco en mi asiento, de incomodidad, porque se que la mente maestra era mi padre.

-Pero tenemos a su hija- dice John.

-Aun así necesitaríamos ayuda- dice Clark usando un tono de superioridad, intentando tener la razón como siempre.

-Podemos pedirla- dice Felix.

-¿A quién?- pregunto sin tener idea de que habla.

-A los Wolves- dice y todos sonríen con malicia.

-Ok- dice Clark alzando los brazos -Pero tu hablaras.

Atravesamos la ciudad lo más discretos que podemos hasta llegar a un barrio solitario, donde huele a rata y comida podrida, además de estar repleto de advertencias escritas con pintura roja para mantener lejos a ojos curiosos, este es el territorio de los Wolves, la segunda banda criminal más peligrosa de la ciudad, obviamente bajo la nuestra.

-Acá huele de la fregada- dice Clark.

-¿Que esperabas que oliera a petunias?- pregunta John y yo ruedo los ojos.

-No me pienso acercar a esos antihigienicos- dice Clark en su papel de princesa soy mejor que todos.

-Cambiaras de opinión al verlos- le digo.

-¿Por qué?- pregunta y yo sonrío.

-Yo sé lo que te digo.

Felix abre la puerta de lamina enfrente de el y nos hace una seña para que entremos, el es el ultimo en entrar. En cuanto entramos solo hay música fuerte, sabanas rotas colgadas por todas partes y hombres con grandes músculos paseándose por ahí.

Volteo a ver a Clark y ella tiene la boca entreabierta, fijando la mirada en varios de los que están ahí.

-Clark- digo y ella me mira.

-¿Qué?- pregunta aun con la atención en otro lado.

-Mejor no te les acerques, te pegaran la rabia- digo burlándome de su comentario antes de llegar.

-No importa, si quieren que me peguen el sida- dice y todos reímos.

-Clark, eres una cerda- dice Jay

Atravesamos todo el sitio hasta llegar con el líder de los Wolves, el cual está sentado y forrado de cuero puro, además de poseer varias gemas robadas de el mismísimo castillo.

-Miren quien vino a verme- dice viéndome a los ojos.

-Beatrice Steal, nueva líder de los Chain- anuncia -Hace ya mucho que no veía tu lindo rostro por aquí.

-Desde que murió papá Rodulf- digo -Si, cuatro años dejan mucho que contar.

-¿Qué vinieron a hacer aquí?- pregunta.

-Necesitamos ayuda- dice Felix.

-Diganme- dice Rodulf entrelazando sus dedos de la mano izquierda con los de la derecha. Ansioso por escuchar nuestro plan