Capítulo IV

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Algo que no les e contado es que por causas del destino no podíamos estar juntos, por más que lo quisieramos no podíamos, lo único que podíamos era encontrarnos, bueno,más bien, reunirnos o salir, ya que ambos vivíamos en lugares muy alejados, prácticamente no teníamos idea de cuando nos veríamos.
Ya era marzo, y las vacaciones comenzaron, ella se fue a un lugar aún más alejado de donde se encontraba, y ya no había tenido contacto con ella como en una semana, hasta que me llego por fin un mensaje de ella, comenzamos a escribirnos, bueno a charlar. Los minutos pasaron, y con ellos las horas, pasaba tan rápido el tiempo que no nos dimos cuenta de la hora, empezamos a hablar a las 6 y ya eran las 10, así que me llamo, ocurrió lo mismo, el tiempo paso tan rápido, recuerdo que ese día era un jueves, cuando empezamos a hablar por teléfono eran las 11:30, paso tan rápido, qué cuando nos dimos cuenta ya eran las 3 am.
No sentía sueño, lo único que me importaba era estar hablando con ella. Era lo mejor que podía pasar, bromeabamos y platicabamos de cosas sin sentido... Esos momentos fueron únicos, y claro llego el momento de terminar la llamada, ambos fuimos a dormir, tratando de soñar el uno con el otro...

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