Capítulo Uno

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-¡Eh, chicos!- Ryo corrió el último tramo de la cancha que lo separaba de Genzo y Taro. Los alcanzó justo antes de que ambos entraran al camerino a prepararse para el partido de esa tarde.- ¿Podrían esperarme un momento?- decía mientras se llevaba una mano al pecho y tomaba aire.

-Eres muy lento, Ishizaki- le respondió Genzo, mirándole. Ryo hizo un ademán con la mano, restándole importancia al comentario.

-¿Qué sucede, Ryo?- preguntó Taro que lo miraba entre curioso y confundido.

El chico respiró profundo. Alzó la barbilla e infló el pecho de orgullo, dispuesto a hablar. Lo hacía cada que lograba captar la atención, sintiéndose importante. El gesto hizo que Genzo retomara el rumbo hacia el camerino.

-¡Wakabayashi! ¿Acaso no escucharás lo que tengo por decir?

Genzo se volvió por un instante. Le miró por encima del hombro y le contestó.

-Nunca lo he hecho, ¿por qué tendría que hacerlo ahora?

-Calla, engreído, y vuelve aquí que sé que te interesará.

Taro le envío una mirada de "Por favor, será sólo un momento" a Genzo, que hizo que este deshiciera sus pasos.

-Bien, ¿qué se supone que sepas tú -hizo énfasis en esa última palabra- que deba importarme?- preguntó, cruzándose de brazos.

Ryo se acercó más, hasta hacer una ronda con sus compañeros. Luego susurró despacio, con misterio:

-¿Ustedes no creen que Tsubasa está comportándose "rarito"?

Genzo y Taro intercambiaron miradas.

-¿Qué quieres decir?- preguntó Misaki, bastante serio.

-¡"Rarito", hombre!- Ryo elevó la voz- así como... Gay.

Taro frunció el ceño. Genzo volteó los ojos cansinamente y se echó su maleta deportiva al hombro.

-Deja de decir tonterías acerca del capitán, Ryo. El que haya terminado con Sanae no significa que sea gay, ¿entendido?- Taro le habló fuerte, y luego volvió su camino hacia el camerino.

-No son tonterías, ¡es en serio!- Ishizaki volvió a correr detrás de ellos- Eso de terminar con Sanae, justo cuando Roberto vuelve...- Taro y Genzo se detuvieron. Ryo volvió a alcanzarles, y nuevamente hicieron la ronda. -¿No les parece sospechoso?- decía Ishizaki en tono intrigante.

-A lo mejor terminó con Sanae para poder jugar bien en el extranjero y no dejarle esperando- concluyó Genzo. Taro aprobaba la teoría asintiendo con la cabeza.

-Eso no es, Wakabayashi. Recuerda que Sanae es capaz de esperarle o de irse con él, así sea al barrio chino, a la Antártida, al estrecho de Bering, o en el peor de los casos: a Brasil, a bailar Samba en las favelas.

Taro detuvo su gesto de asentimiento, y miró fijamente a Ryo, y luego a Genzo que ahora miraba un punto fijo hacia el horizonte.

-Déjate de cuentos, Ishizaki. ¿Eso es lo único que tienes para decir que Tsubasa es gay?

-Bien, vale. Si no quieren creerme, es problema de ustedes, pero en un rato se darán cuenta que no miento.

Genzo y Taro negaron con la cabeza y entraron al camerino.

Ishizaki y sus demencias. Aunque no caía mal comprobar...

-¿Ustedes por qué tardaron tanto?- Matsuyama les hablaba con aire reprobatorio- Dentro de poco inicia el partido y no están preparados.

-Relax, Hikaru. Yo los detuve un minuto. Ya sabes, asuntos importantes de alta confidencialidad- reconoció Ryo, sintiéndose importante una vez más por haber captado la atención de todos.

-Comadreando, como tres cotillas de barrio- exclamó Kojiro con la cabeza metida en su casillero.

-Eh, Hyuga, es que nosotros si tenemos vida social- respondió Genzo dejando a un lado su maleta y quitándose la camiseta.

Se escuchó un "uuuh" general de parte de todos los demás. Kojiro cerró su casillero de un portazo, y se acercó a Genzo con aire amenazador.

-¿Qué decías, "Ricky Ricón"?

Sus caras estaban a pocos centímetros, retándose con la mirada.

-¡Ya basta!- interrumpió Tsubasa- No hay necesidad de pelear, chicos. No antes de un partido. Necesitamos estar en armonía para lograr la victoria.

Se hizo un silencio forzado y todos los jugadores, incluidos Genzo y Kojiro, volvieron a sus actividades.

Taro le lanzó una mirada rápida a Genzo, señalando a Tsubasa, quien miró a éste último detenidamente. Luego abrió grandes ojos y se acercó a Misaki en dos zancadas, sorteando toallas, zapatillas deportivas, uniformes y bancas que se encontraban a su paso.

-¿Te fijaste en lo que trae Tsubasa?- le dijo en un susurro a Taro, que lo miró extrañado. Misaki dirigió su mirada hacia Tsubasa, pero no le encontraba nada extraño, salvo los cordones rosa que ataba sonriente.

-¡Cordones rosa!- le señaló a Genzo que negó con la cabeza.

-¡Pendiente!- Genzo bajó la voz forzadamente- ¡Tiene puesto un pendiente!

Taro y Genzo se miraron espantados.

-¡Es gay!-susurraron para sí.

-Lo dicho: ¡cotillas!- gritó Hyuga una vez miró a Wakabayashi y a Misaki hablando en un rincón. El primero se puso en pie, enojado.

-¿Qué es lo que te pasa Hyuga? ¿Tienes algún problema que quieras resolver?

-No me trago eso que estés saliendo con mi cuñada, Wakabayashi.

Genzo enarcó una ceja, luego sonrió:

-Ah, era eso, "cuñis".

Los demás presentes no entendían ni una sola palabra, salvo Ken y Misaki que ya sabían por dónde iba la cosa.

Kojiro miró a Genzo, y luego le dio un puñetazo al casillero más próximo.

-¡Cuñados! ¡Por todos los Cielos!

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⏰ Última actualización: Mar 26, 2016 ⏰

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