Tsunami

CAPÍTULO 1

Me desperté mas pronto de lo normal.

La gallina- si se la puede llamar así -de los vecinos de al lado no había "cantado", lo que es un alivio teniendo en cuenta que hace años que su "glorioso" canto dejo de ser tan glorioso y empezó a traumar a niños pequeños todas las mañanas.

Me levanté de la cama, subí la persiana , abrí la ventana y salí de mi habitación.

La casa estaba sumida en un completo silencio. Tanto silencio que daba incluso miedo.

Las escaleras de caracol blancas me ofrecían la entrada a la parte baja de la casa, donde me esperaba mi perro: "Balto".

Balto era un husky que habíamos adoptado hace ocho meses.

Su pelo era tan suave como... Bueno, que me enrollo demasiado.

En resumen de lo que acabo de decir, su pelo es suave.

Baje corriendo las escaleras rezando por que por detrás de mi no hubiera un asesino sediento de sangre joven.

Llegué corriendo a la cocina y abrí la puerta de golpe. Instantáneamente me metí dentro y cerré la puerta tras de mi.

Salvada.

Dentro de la cocina no solo me esperaba Balto, también me esperaba mi hermano mayor.

-Hola hermanita- Luck estaba mas feliz de lo normal -. Mira lo que me me encontrado en el buzón.

Se acerco a mi y me enseño una carta que era para MI y que había abierto EL.

-¿Se puede saber que hace con mis cartas?- el simplemente se limitó a llevarse el dedo índice a la boca indicándome que me callara.

-Lee lo que pone y calla- me dio la carta y yo la cogí de mal humor.

Empecé a leerla y ponía lo siguiente:

Estimada Jane,
Primero de todo el grupo "viajes para todos" le agradece solemnemente que hayas participado en el concurso "a Japón".
La segunda cosa de la cual queríamos informarla es que usted ha ganado nada mas y nada menos que seis billetes a Japón.
Encontrara los billetes en la parte trasera de la carta.
Gracias por su tiempo.

De repente, como si un fuerza mayor se hubiera apoderado de mi, agarre el sobre y rasgue la parte de atrás para coger los seis billetes.

-¡Siii!- empecé a bailar emocionada.

- Nos vamos a Japon - Luck parecía entusiasmado así que decidí gastarle una bromilla.

-¿Quien ha dicho que tu estés invitado?- le mire seriamente tratando de aguantar la risa al ver su cara impactada -, es coña.

Le di un billete y el me abrazo.

-¿Puedes llamar a los chicos para preguntarles si quieren venir?- le mire con ojos de cachorrito. Eso siempre funciona -,es que mi móvil no tiene batería.

El acepto a regañadientes, pero lo que importa es que acepto.

A la media hora de haberlos llamado llegaron a casa.
Primero llego Max, luego llego Derk, luego llegó Kelvin y finalmente llego Dylan.

Esta panda no es cualquier panda, no no no, son los dioses griegos del insti.

Muchas chicas están "enamoradas" de Max, pero lo que no saben es que es gay.

Es bastante gracioso ver la cara que pone cuando una chica que no soy yo (modestia aparte) se acerca demasiado a el.

Pero bueno, el caso es que yo soy un poco distinta a las demás chicas y no me relaciono demasiado bien con las chicas.

Cuando Max, Dylan, Kelvin, Luck y Derek se sientan les enseño los billetes y les doy uno a cada uno.

Apoyo mi billete en la mesa y me tiro al sofá en modo triunfal.

Al cabo de unos segundos noto como Max se ríe. No es una risa cualquiera, no. Es una risa de nerviosismo.

-¿Que pasa Max?

-Siento desilusionarte, pero...- se callo un momento.

-¿Pero que?

-Estos billetes son para las 17:30...de hoy.

-No me jodas- me levanto de golpe del sofá y cojo el billete que había dejado en la mesa para verificar que lo que había dicho max era cierto, y si, es cierto -.Mierda.