Capítulo 9.

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"Eso fue un tranquilo comienzo, una ilusión segura."

Dino había perdido las esperanzas con Jun, sabia que este no podía recordarle más y que MingHao había ganado después de todo. Sólo tendría que aprender a estar sin el chino y seguir todo normal.

Él sabia que tenia la culpa por haber besado a su mejor amigo, pero en su defensa, él no se esperaba ello. DoKyum había dejado de hablarle cuando ocurrió lo del accidente y sólo se dedicaban a cuidar de Jun en el hospital. Lloraba todas las noches para que despertara, pero sabia que eso era imposible.

Después de haber pasado unas semanas en el hospital llego otro chino con el cabello teñido a llorarle a Jun, el confundido quiso hablar con el chico, pero DK se lo había prohibido por alguna razón que no recordaba, las siguiente noches no fueron tranquilas.

Dino y MingHao peleaban para mantenerse con Jun, hasta que la madre de este llego y dejo a cargo a DK para poder hablar con esos dos y arreglar de una buena vez las cosas.

"—Mi hijo esta sufriendo ahí adentro por tu culpa Chan, MingHao le hizo menos daño que tu, así que te prohíbo acercarte a mi hijo—dijo la madre de Jun."

Después de esto Dino había corrido hasta Jun encerrándose, despidiéndose con un ultimo beso antes de pelear con el chico arcoíris y decirle en un último susurro a Jun "—Jun ¿recuerdas cuando eras mi acosador"

— Juro que lo siento, pero no es fácil olvidarte-se susurró a si mismo.

Desde ese momento no supo más de Jun, no veía a DK como para poder preguntarle que sucedía, pero no contaba con que el chino saliera del hospital un mes después y chocara casualmente con él en aquel lugar donde lo había conocido. Y que tres meses después los viera tomándose de la mano afuera de la pizzería.

Odiaba a ese chico con todas sus fuerzas, pero a fin de cuentas Dino le daba la razón a la madre de Jun, él había hecho mucho daño como para reclamar, pero aunque eso fuera posible, prefería ser egoísta y luchar por la persona que ama, así sea que él juegue el papel de acosador.

<Voy a conquistarte, hasta que vuelvas a recordarme...>

Junto con esos pensamientos corrió lo que sus piernas le permitieron y se adentro a su casa a buscar su caja de recuerdos y poner un plan improvisado en marcha.

(¿Han entendido hasta aquí?)

***

La noche era fría y solitaria, Dino aún caminaba bajo los faroles de la calle solitaria y una que otra mirada de alguna persona ebria.

Hace más de dos horas había terminado su turno en la pizzería, pero se había ofrecido a limpiar y cerrar el lugar, sus planes para esa noche eran ir a casa de DK y hablar, así tuviera que amarrar al chico. Este salía más tarde ya que trabajaba algo alejado de casa y en una empresa un poco formal.

Reconocería el camino hasta con los ojos cerrados, ya que la casa de DK estaba frente a la casa de Jun. Sólo dos calles más y habría llegado a su destino.

— ¡Tú!—gritaron tras su espalda, por lo que ignoro ese gritó.— ¡Hey! Él chico de la pizzería, espera.

Esa voz que le llamaba se le hacia conocida, así que se giró sobre sus talones y miro a la persona que menos se esperaba encontrar.

Jun caminaba hacia él con una sonrisa, mientras que agitaba su mano.

Hola—dijo el chino—¿no sabía que vivías por aquí?

Dino se debatía entre responder o salir corriendo, pero solo pudo agachar su mirada.

Vine a ver a un amigo—contestó.

Oh, bueno, entonces caminemos hasta donde nos tengamos que separar.

Jun camino, esperando ser seguido por el más bajo, poco después Dino se encontraba tras su espalda caminando, ambos en silencio.

—¿Donde vive tu amigo?—preguntó con algo de interés.

Dino quería realmente correr, no quería que Jun siguiera hablándole o se soltaría a llorar.

En la casa rosa...—murmuro.

—¿DoKyum?—dijo—¡Yo vivo frente a él!

<Mátenme> pensó el menor.

Sus piernas comenzaban a temblar, sus mejillas estaban rojas a causa de frío y eso el chino lo había notado.

—Es amigo mío—soltó, para luego quitarse su bufanda y sorprender al menor, poniéndosela.—No sabía que eran amigos.

Los ojos del menor se volvieron borrosos, a causa de las lagrimas que estaba intentando detener, Jun le había dado su bufanda, aún recordaba todas esas cosas buenas que hacia por él.

—Eso es genial...—logró articular.

—Si, ven a visitarme cuando quieras, estaré encantado de conversar más contigo.

Dino estaba deteniendo las ganas de llorar, incluso hasta el último momento, seguía siendo tan bueno. Su interior gritaba que le dijera la verdad, pero su conciencia le decía que mantuviera la compostura y aguardara.

—Tu madre no querrá verme...—susurro para no ser escuchado—Si puedo lo haré.

Ambos llegaron del lado de la calle de Jun, sonrieron y Dino se despidió haciendo una reverencia, antes de girarse y caminar a casa de DK.

Jun sólo podía mirar la espalda del más bajo sin poder creer la tristeza que este emanaba. No dijo nada y también entro a su casa.

La frase del menor rondaba por su cabeza, pero lo que más le intrigaba era que fuera a la casa de DoKyum.

< ¿por que va a ir a casa de DK?>

HiSM17E

¿Les gusto? ¿ya le entendieron más?

Stalker [JuNo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora