EL DETECTIVE

CAPITULO 2: "El Laberinto"

No encontramos a ninguna persona perdida, pero si moho, ropa rasgada, todo excepto personas.

-Y… ¿Cómo se llaman?-pregunté porque, si iba a resolver este misterio con ellos, al menos debía saber sus nombres.

-Yo me llamo Nacho y él se llama Juan-me respondió el que mayor entre ello.

Y tu, ¿Cómo te llamas?-me preguntó Juan

-Yo me llamo Gabriel, pero me pueden decir Gabo-dije con una gran sonrisa.

Entonces empezó a temblar, creímos que nos caería encima, pero solo era una pared moviéndose y dejando ver una puerta de madera muy vieja.

-¡Vamos!-grité-no sabemos si esta será nuestra única oportunidad.
Así que salimos corriendo a ver que había detrás de la puerta.
Vimos que solo era un cuarto con poca luz, muchos artefactos y notas relacionadas. Entonces se cerró la puerta.

-No, ¡maldita sea!-grité-estamos atrapados.

-No del todo-me dijo Nacho, que al parecer sabia mucho de artefactos y tecnología-estos inventos los podemos usar para salir de aquí.

-¿Cómo?- dijo Juan, algo molesto por no saber que hacer.

-Puedo hacer que se abra alguna puerta escondida.

-¿Puerta escondida?-dijimos Juan y yo al mismo tiempo.

-Claro, estas computadoras y dispositivos no son los comunes, me acuerdo haber visto esto antes de terminar mis estudios, no creo demorarme mucho en descifrarlo.

-Ok-dije yo-por mientras buscaremos algunas pistas con Juan.

Mientras Nacho trataba de abrir una supuesta puerta secreta, Juan y yo encontramos unos que hablaban solo de artefactos antiguos.

-Esto parece un videojuego de misterio-pensé-buscando pistas, descifrando códigos, etc…
-Lo logré-gritó Nacho entusiasmado.

-¿Lograste abrir la puerta?-preguntó Juan.

-Claro-dijo entusiasmado Nacho.
-Ahora podemos seguir-dije yo-. ¡Vamos!

Pero cuando nos fuimos de ese lugar encontramos algo mucho peor, más habitaciones.

-¡Ahhh!-gritó Nacho ofuscado- ¡¿Por qué tenia que haber más cuartos?!.

-Tranquilo-le dije-nos dividiremos y encontraremos una salida, además, si nos perdemos, usaremos estos boqui toquis que me encontré trajinando en la otra habitación.

Mmm…-dijeron, luego me quedaron viendo como si estuviesen dudando-Ok, vámonos.