Extra: final alternativo

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Montpellier, 12 de marzo, 12:37

— ¿Alya? Alya, ¿me oyes? ¡Alya!

Al no recibir respuesta, la joven miró el móvil para comprobar fastidiada que la llamada se había cortado por falta de cobertura. Rápidamente, subió un piso más arriba, mirando atentamente el indicador de cobertura de su móvil y esperando a que subiera.

— Venga, sube... Aunque sea sólo una raya... ¡Eso es!

Después, trató de llamar de nuevo a su amiga, aquella vez con éxito.

— ¿Alya? ¡Por fin! Oye, perdón por no llamarte antes, pero se ha averiado la antena y tengo que usar la señal pública...

— Bueno —habló la voz al otro lado del teléfono—, lo importante es que podemos hablar.

— Sí, tienes razón... ¿Cómo va todo por allí?

— Bueno, bien... Y con «bien» me refiero a que Chloe ha fracasado de nuevo en su intento de ser famosa, para variar...

— ¿De nuevo? ¿Cuántas veces van desde que me fui?

— Lo tengo apuntado por aquí... 537 veces, esta es la número 538 —recitó solemne.

— ¿Y aún no se rinde?

— ¡No! Es más perseverante que Hawk Moth...

— A mí me lo vas a decir, Alya...

— Es verdad... Oye, ¿y a ti? ¿Cómo te va por allí, Marinette?

— Pues, bastante bien... Exceptuando el hecho de que aquí hay muchos más exámenes finales que allí. Por ello, tenemos que pasar un montón de rato en la biblioteca estudiando, ya que allí hay muchos libros sobre el temario y demás. Pero, para colmo, ¡la bibliotecaria es una amargada cascarrabias que se queja incluso del ruido que hacemos al pasar las hojas! Es imposible estudiar con ella refunfuñando a cada rato.

— ¡Wow! Relájate, Marinette. ¿Necesitas pasar un tiempo con el amor de tu vida para ponerte de mejor humor? Ya sabes a qué me refiero...

— ¡Alya! —replicó avergonzada.

— ¡Jajajajaja! Vale, vale, perdón... Y, ya que hablamos sobre él, ¿qué tal te va con Adrien?

— Pues, ¡qué te voy a decir! Tan enamorada como el primer día, a lo mejor incluso más.

— ¿Incluso más? ¿Después de todo el lío que tuvisteis antes de que te fueras?

— Sí, lo sé, pero ¿quién no se enamoraría después de que él lo resolviera de la manera más romántica posible?

Flashback

— Déjala, Adrien. Ella lo que más necesita ahora es olvidarte —le dijo Alya—. Ya se fue, olvídala tú también.

— Pero... ¡Yo no quiero olvidarla! ¡No quiero olvidar a la persona que amo! —replicó, zafándose de su agarre.

Al estar libre, el joven corrió hacia Marinette con la misma energía de antes. Esta vez, Nino y Alya no trataron de detenerle. Esperaban que todo acabase bien. Cuando Adrien llegó a Marinette, le cogió del hombro para que se diera la vuelta.

— Adrien, déjame. No quiero verte.

— ¡Por favor, Marinette! Déjame hablar contigo, sólo 5 minutos. Después, te dejaré en paz, te lo prometo. Sólo 5 minutos, por favor... —suplicó el chico, arrodillándose.

— Agh, está bien... Pero en privado, que ya hemos montado suficiente numerito por hoy.

~

— ¡Sí! Lo recuerdo como si hubiera sido ayer —exclamó Marinette—. No recuerdo exactamente lo que me dijo, estaba demasiado confusa. Entendí sólo lo del final...

~

— Así que, por favor. Estoy dispuesto a amar a quien quieras ser, tanto a Ladybug como a Marinette. Sólo te pido una segunda oportunidad. ¿Tendrás piedad de este pobre gato triste y abandonado, con su corazón roto, My Lady?

Tras oír aquello, Marinette sólo pudo quedarse mirando al chico suplicando enfrente suya, sorprendida y buscando las palabras correctas para expresarse. Finalmente, logró recomponerse un poco y murmurar unas palabras.

— Oh, qué demonios.

Acto seguido, hizo exactamente lo que le dictaba su corazón: se lanzó hacia el chico para unir sus labios en un beso que, para ella, expresaba mejor sus sentimientos que cien mil palabras. El joven lo siguió en cuanto pudo reaccionar. Si bien no era su primer  beso, y seguramente de Marinette tampoco, sí era el primer beso que daba a una persona que quería de verdad. También era el primero que lograba darle pequeños escalofríos por la felicidad y la pasión que sentía ante aquel simpel acto.

Los dos jóvenes se separaron con una sonrisa. Aunque Marinette se iba lejos, eso no los frenaría. Porque ambos sabían que mantendrían el contacto, esperando a verse de nuevo, una vez más.

~

— Madre mía, estáis hechos unos tortolitos...

— Ni qué hablar de tú y Nino.

— Ahí me has pillado.

— Pero, ¿sabes qué? ¡El próximo curso Adrien se viene a mi instituto! Cuando vaya a visitaros en verano, en el viaje de vuelta, se vendrá con nosotros. Su padre no irá, ya que su negocio está en París, pero se quedará con unos familiares que tiene en la ciudad. Y, por casualidad, viven cerca de nosotros.

— ¡Qué suerte! Parece que el destino os quiere bien juntitos, ¿eh?

— Sí, eso parece. Y me aseguraré de que no vuelva a separarnos nunca más.

Fin

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ALA. AHÍ TENÉIS, QUERIDAS SHIPPERS. VUESTRO FINAL FELIZ.

Pero, aunque prefiráis este final... Votad la otra parte si os ha gustado, ¿vale? Es importante para mí.

En fin, lo de siempre. Espero que hayáis disfrutado leyendo el one-shot. Si es así, votad y compartid con vuestros amigos la historia. Ya sabéis. No les marginéis. Pobrecitos.

Buenos días/tardes/noches, y nos vemos en la próxima historia.

¡Ana_Bloc fuera!

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Amor de adolescentes [One-Shot]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora