Después de hablar con Yangmi, Jin y yo fuimos a la empresa, el jefe nos estaba llamando para algo importante.
-¿De qué crees que quiera hablarnos?- preguntó Jin curioso-. ¿Crees que sea un aumento?
-Vamos Jin.- reí irónico-. Tenemos más de dos años en esa j*dida empresa y nunca nos han aumentado el sueldo y lo sabes.
-Siempre hay una primera vez para todo, Yoongi.- rió mirándome con una cara extraña.
-Si, si.- rodé los ojos y le solté:- Sólo vamos a ver que quiere y ya.
-Está bien.- seguimos andando por el edificio.
-¡Cuidado!- se oyó un grito al final del pasillo.
-¿Qué demon...- caí al suelo a causa de una pelota de tenis. ¡¿Quién demonios trae una pelota de tenis a BigHit?!
*Nota: BigHit originalmente es una empresa musical. Aquí será otro tipo de empresa solo que en apariencia seguirá siendo musical.
-Lo sentimos.- lo que me faltaba, Kim Taehyung y Jeon Jungkook.
-¡Fue culpa de Kookie!- se quejó Taehyung. A veces me preguntaba su edad mental... ¿Sería de un alduto o de un niño de seis años?
-No se preocupen, nadie es perfecto.- sonrió Jin amablemente-. Pero que no se vuelva a repetir.
Yo sólo miraba todo callado, no había hablado con V ni con Jungkook desde el día de la graduación de Shoi y Yangmi. No sabía que pasará hoy. Pero si Jungkook me dirigía la palabra, no resistiría y le golpearía. Claro, todo esto por dejar a la pequeña Yangmi sola el día del baile.
-Está bien, hyung.- dijo Jungkook haciendo una reverencia en modo de disculpa.
-Nosotros nos retiramos.- hablé incómodo. No me sentía a gusto con Jungkook ni V.
-Adiós.- se despidió Seokjin.
-Son buenos chicos.- dijo después de un rato.
-Taehyung me odia, Jin.- me reí fuertemente-. Es un milagro que no me haya mirado mal.
-Quizás sea porque estamos en la empresa.- razonó caminando a la oficina del jefe.
(...)
-Prácticamente nos trajiste aquí para decirnos que tenemos dos nuevos compañeros y que Taehyung junto a Jungkook, serán parte de nuestro equipo.- recité lo que él había dicho en esta hora que estuvimos aquí.
-Sí, Yoongi, sí.- bufó rodando los ojos.
-¿Y cuáles son sus nombres?- preguntó Jin aún serio.
-Park Jimin y Woo Ji Ho.- la puerta se abrió, revelando a dos chicos, un pelinegro bajito y a un rubio alto de nariz un poco grande, siento que a este último lo había visto en algún lado.
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