La vida soñada

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Ya lo teníamos planeado todo de principio a fin y aunque sonara un poco insensato estabamos dispuestos a luchar contra el mundo si era necesario por conseguir la vida soñada en la que los dos éramos felices y cumpliamos nuestras metas, que era estar juntos por siempre.

Éramos y somos unos niños como para planear una vida juntos, pero sin embargo lo hicimos ya que era hermoso pensar que pasaría una vuda contigo. Que ingenua fui al pensar que me quedaría con mi primer amor todo el tiempo que yo quisiera.

Sentía que aunque termináramos una y mil veces nuestra historia ya estaba escrita y que como en las películas, después de todo volveríamos a encontrarnos, a ser felices, a vivir esa vida soñada, pero al igual que en las películas y los libros solo se quedó en nuestra imaginación o bueno en la mía ya que a ti nunca te importó.

Las palabras escritas en estas páginas se quedaron en solo eso, palabras sin sentido que una ilusa muchacha escribe sin tener el valor de decirtelo a ti personalmente, es que ese es uno de mis muchos defectos el no poder expresar todo lo que siento y hacer que esos sentimientos me acaben de a poco, me quemen por dentro sin saber como sofocar este dolor que siento sin ir contra mis principios.

Pero yo lo quería ferviantemente compartir una vida, una eternidad con tiempos buenos y malos, tan buenos como ese 14 de febrero y tan malos como nunca antes lo tuvimos; malos que nos ayudarían a ser más fuertes, más confiables el uno con el otro, pero tú no quisiste saber que tanto podríamos resistir ya que con la primera persona que supuestamente te entendía te fuiste sin recordar que teníamos una vida en espera.

Ahora seguro lo estas planeando ya con ella y espero que cuando hablen de sus planes te acuerdes de mí y que por alguna extraña razón mi imagen aparezca en tu mente y tan solo por unos segundos me extrañes como yo lo estoy haciendo desde el momento en que tomaste la decisión de irte sin miras atrás. Dejandome con un enorme vacío y gran baúl en mi mente repleto de recuerdos y sueños rotos.


P.F.7: Una vida juntos, eso es lo que quiero.

Cartas para ÉlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora