Capítulo 3

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Carolina siempre se lucía en los hombros de algún bondadoso muchacho. Siempre miraba con vista perdida a Fernando, quien parecía no darle importancia aquello. "Una minita más", decían.

Una noche, cuando Ahogados en Rock se presentaba en el Auditorio Sur de Temperley, Carolina esperó a la banda después del recital. Bah, a la banda... Esperaba al hombre que la deslumbraba.

Era una noche calurosa. Fernando salió con una Quilmes en mano y en musculosa, tal como lo imaginaba Caro en sus fantasías. Ella se quiso acercar, pero su timidez se lo evitó.

-Che Fer, ahí esta la piba que te ficha siempre.-dijo Pitu.

-La vi... Tengo miedo de que sea esa típica minita que sigue a la banda por tenerle ganas a uno.

-¿Y eso en qué te afecta? Larga la moral y anda al ataque.

Fernando se acerco a la piba y le pregunto el nombre.

-Carolina me llamo.

-Un gusto. Yo soy Fe...

Caro lo interrumpió.

-¿Pensas que no me sé tu nombre? Jaja. Que mala fan sería!

-No me acostumbro a ser conocido todavía. ¿Queres venir a tomar algo a la combi?

-Me está esperando mi hermana en casa, perdón.

-Está bien, anda el viernes a vernos en Lomas y decile a tu hermana que no te espere.

Y así se despidieron. Hasta el viernes...

Rocanroles sin destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora