Juguemos a que Somos Animales :v

Capítulo 2

Antes de que pudiera leer su contenido, Izaya se le abalanzó por detrás, haciendo que ambos cayeran hacia el frente de forma brusca.
Agarró su móvil en ese momento de distracción para el rubio y lo cerró con fuerza, lanzándolo por el aire y dejando que impactara contra una pared para destruirlo, no por completo pero si dejándolo inútil.

-¿Izaya...?-Murmuró Shizuo volteando hacia el informante y levantándose del suelo.

-No debes hurgar en los asuntos que no te importen, Shizu-chan-Espetó con una sonrisa ladina y esa expresión inerte en sus ojos carmesí.

-¿Por qué estoy en tu lista de cosas que hacer...?-Dijo Shizuo confundiendo a Izaya.

-¿Pero qué dices Shizu-chan?-Rió sarcástico, sin embargo el rubio no le prestaba atención-A no ser...

Izaya se acercó sin precaución al rubio, haciéndolo exaltar un poco.

-Pulga, ¿Qué haces...?-Musitó sintiendo su cara arder, el olor de Izaya se intensificaba y tenía la sensación de poder comerlo, de que ese olor provenía de algo muy delicioso. Sus piernas le fallaron por un momento, haciéndolo caer de trasero al suelo.

Nada de esto fue desapercibido por el informante, ya que sabía que estos meses serían especiales para el rubio. Sintió la respiración agitada de Shizuo, olfateándolo por el hombro y aunque estremeció levemente a su cuerpo, se acercó de forma más intima a Shizuo.

-¿Sabes Shizu-chan?-Dijo divertido Izaya mientras se colocaba de forma provocativa sobre el rubio, tomándolo por los hombros y dejando que sus miembros dormidos rozaran por un leve momento-A fin de cuentas, si eres una verdadera Bestia~

La respiración de Izaya en su oreja estremeció a Shizuo, quien no comprendía ni papa de lo que estaba sucediendo. Primero hablaban de una cosa y después de otra, ¡Eso no tenía sentido!, Su cuerpo comenzaba a calentarse de una forma extraña, sentía escalofríos y todo eso comenzó a asustarlo un poco y ¡todo era culpa de la pulga!

-¿A qué te refieres Izaya?-Dijo Shizuo tratando de mantener su estado intimidante aunque tuviera al pelinegro sobre él.

-Si quieres saber más, pregúntale a Shinra~-Canturreó antes de levantarse e irse saltando, ya que no tenía donde quedarse, se dirigió hacia el departamento de Shizuo. Ya que sabía que este iría directamente con el médico ilegal en este momento.
No le importó si el rubio se percataba, sabía que no estaba de ánimos para pelear.

-Maldita sea... Izaya-El rubio se levantó suave del suelo y se encaminó hacia la casa de Celty y Shinra. El olor del pelinegro aún quedaba dentro de su alcance, percibiendo sin más que fue hacia su departamento -¿Pero qué me sucede hoy?...

Se murió esta parte alv JAJAJAJ

Mientras se servía un poco de agua, escuchó golpes suaves contra la puerta, los cuales se iban intensificando por cada segundo que pasaba.

-Ya voy, ya voy-Abrió la puerta y se encontró con Shizuo algo molesto. Lo invitó a pasar y ambos se dejaron caer en el sofá de la sala.

-Necesito respuestas-Escupió el rubio desconcertando un poco al doctor.

-Primero debo tener preguntas-Contestó Shinra con una sonrisa divertida.

-Es sobre Izaya.

-Oh, ya veo~. Al fin te diste cuenta-Sonrió divertido Shinra.

-¿De qué exactamente?

-Shizuo, estás en temporada de celo.