Hipótesis 23

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Cita #1

Estoy bastante nervioso, mis manos se convierten poco a poco en el océano pacífico, y mis piernas comienzan a temblar.
No habíamos acordado el día exacto de nuestra reunión de negocios (porque así lo quería llamar, pues no lo considero una cita como tal), pero supuse que nuestra "cita" se haría este mismo encuentro.
Rooney sonríe en cuanto sus ojos se topan con los míos. Involuntariamente una sonrisa se forma en mi rostro.

--¿Listo para nuestra cita? -- toma mi mano sujetándola con una fuerza inimaginable.

--Más que listo-- respondo imitando nuevamente mi boba sonrisa -- tengo un lugar en mente que parece perfecto.

Recorremos en silencio el parque, cruzamos la avenida y finalmente llegamos a un puesto de helados.
Rooney se apresura en tomar el mejor lugar, algo bastante inútil pues somos los únicos en el local.

Un hombre con una estatura impresionantemente alta aparece frente a nosotros con un pequeño cuaderno y su inusual pluma de plumas exóticas.

--Supongo que no necesitan ningún menú-- sonríe.

--Dos helados grandes de chocolate-- suelta Rooney.

El hombre asiente y se retira.

--¿Te gusta el helado de chocolate?-- pregunta clavando su mirada.

-- Me encanta.

--Fue por impulso, no quería que el gran yeti nos arruine la velada.

La duda crece, pero las preguntas no logran salir de mi boca. El extraño comentario de Rooney llama mi atención para analizarlo después.

El gran hombre de las nieves, lleva nuestra felicidad, una inmensa porción de delicioso sabor a chocolate.
La mirada de Rooney va directo al helado, toma una porción y la sumerge para que sus papilas gustativas se encarguen.

--Ya me siento más normal.

[Hipótesis: El helado es la pócima secreta para ser normal].

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