Capítulo 4

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-Narra Aleksander.-
Esta mañana había sido divertida, tuve la suerte de encontrarme con Dominika, ese chico me hace sentir extraño,  será el asco que tengo hacia el, aunque realmente no entiendo el porqué de aquel beso, pero me sirvió para dejarlo en vergüenza una vez mas.

Estaba a punto de dormir cuando escuche la vibración de mi teléfono móvil.
-Me cago en la puta...-Agarre mi teléfono de mala gana y leí el mensaje, "Hey Aleks, hay una fiesta en casa de tony, en la piscina, te animas? PD: No olvides los condones"
-"Puto salido, que clase de pregunta es esa? Pues claro que ire, piensas que me voy a perder a tias buenas en bañador?"-Tras esa contestación "Y luego el salido es el.", agarre algunas latas de cerveza para llevarme.
Termine de prepararlo todo, busque el mechero y las llaves en los bolsillos de mi chupa de cuero antes de salir de casa. La calle estaba oscura y solitaria, las farolas no solían funcionar pasadas las tres de la mañana, busque mi moto con la poca luz que salia a través de la linterna de mi móvil. La casa de Tony quedaba algo apartada de la mía, me puse los audífonos para hacer el trayecto mas ameno y arranqué la moto. Iba concentrado en lo que escuchaba hasta que vi a Karolina cruzar enfrente de mi.
Paré la moto frente a ella.
-Hey hermosa, hay una fiesta en la piscina de Tony, ¿te animas?- Hice una seña para que montara en la moto y ella aceptó con la cabeza, el camino la paso agarrándose a mi, pegando sus enormes pechos contra mi espalda, no negaré que no me gusto.

Llegamos a casa de Tony, ya desde fuera se escuchaba la música y el alboroto, aparqué y bajamos de la moto.
Nada mas entrar, había como unas veinte personas bailando al ritmo de la música, bebidas y aperitivos por las mesas, alguna que otra lata de cerveza vacía por el suelo y un pedazo de equipo de música del tamaño de mi cama, 'el hijo de puta es rico'. Comencé a dar vueltas por toda la casa, mientras andaba por los pasillos veía a todo tipo de parejas liando se en cada una de las esquinas, miré a mi izquierda, una gran puerta de cristal transparente la cual detrás de ella se podía ver el jardín y la piscina llena de gente. Llegue a la escalera, iba a subir pero me detuve al escuchar gemidos provenientes de las habitaciones.
-¡Aalekssss amiiigo!-Al girarme vi a Max, iba algo borracho lo que era de costumbre.-Haaass veniido... ¿te pillaste alguna tiia buenorra?-puso cara de pervertido.
-Bueno, me traje a Karolina- Sonreí de medio lado.
-Jodeeer tio, esa esta buenissssima-Puso su mano sobre mi hombro.
-Por algo la e traído-Solté una pequeña risa, me solté de el como pude y de un salto bajé la escalera para pillar una cerveza.
Las horas pasaban lentas, o así lo veía yo, la cabeza me daba vueltas y mis arcadas eran inaguantables, algo normal después de haberme puesto hasta el culo de pastillas y alcohol, mirando hacia la piscina, pude ver a mi Dominika a lo lejos.
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Bueno, porfin volvi a actualizar... tuve unos problemas por los cuales no tuve tiempo para escribir... aunque compensaré con este capitulo el triple de largo. siento la espera, Sayonara*^O^*~

The Love Hurts.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora