ABEDUL.
(Betula pendula Roth.)
Depurativo, gota.
Descripción:
Este gran árb caduco que puede llegar a alcanzar los 30 metros, es uno de los más característicos de Europa septentrional, noroccidental y central. Su nombre Betula pendula se debe a que sus ramas más jóvenes son colgantes.
Su madera y su carbón son de calidad excelente. Su corteza, de un llamativo color blanco, es impermeable, de ahí que en la antigüedad se empleara en la fabricación de objetos domésticos como vasos.
Para eliminar el exceso de líquidos:
Las hojas de abedul son muy preciadas en fitoterapia por su contenido en flavonoides, especialmente hiperósido, de propiedades diuréticas y depurativas.
Al favorecer la eliminación de cloruros y ácido úrico, se emplea tradicionalmente en caso de gota. Asimismo previene la formación de cálculos urinarios.
Por último, sus interesantes propiedades diuréticas y desinfiltrantes resultan muy interesantes en caso de retención de líquidos y edemas de los miembros inferiores ligados al síndrome premenstrual.
ACHICORIA.
(Cichorium intybus)
Digestiones pesadas. Hígado perezoso. Estreñimiento.
Descripción:
La achicoria, también conocida como hierba de capuchino, hierba de café u ojos de gato, es originaria de las regiones mediterráneas. Crece espontáneamente al borde de los caminos y terrenos escarpados, pudiendo alcanzar hasta un metro de altura.
Se sabe que su historia como remedio medicinal data de muy antiguo: algunos jeroglíficos testimonian su consumo con fines terapéuticos. Los romanos también la consumían en forma de infusión, cruda o cocida para paliar diversos trastornos.
Mejorar las digestiones pesadas:
En fitoterapia se utiliza la raíz por su contenido en inulína, aunque también posee azúcares, sales minerales y principios amargos.
La achicuria es un excelente tónico-amargo. Tradicionalmente, se utiliza como tónico estomacal al estimular la producción de jugo gástrico.
Asimismo, es hepatoprotectora, aperitiva, colerética y colagoga, por lo que se recomienda en caso de híjado perezoso. También se conocen sus propiedades laxantes.
AJO.
(Allium sativum L.)
Hipertensión, prevención de accidentes vasculares. Antiséptico pulmonar e intestinal. Vermífugo.
Descripción:
El ajo ocupaba ya un destacado lujar en la alimentación de los egipcios y de los hebreos. Los egipcios lo elevaron incluso, al rango de divinidad.
El control de la hipertensión:
El ajo disminuye la agregación plaquetaria y aumenta sensiblemente la actividad fibrionolítica. Estos dos efectos conjugados le confieren propiedades antitrombóticas. Gracias a su actividad hipolipemiante e hipocolesterolemiante, previene igualmente la arteriosclerosis y los accidentes vasculares asociadas a la misma.
Por lo tanto, el ajo mejora la circulación sanguínea y de ahí su acción beneficiosa sobre la hipertensión arterial. En trabajos realizados recientemente se ha demostrado que no sólo es bacteriostático, sino que también es antifúngico y un buen desinfectante intestinal.
Las propiedades del ajo se deben a unas sustancias de naturaleza azufrada, la aliína y el ajoeno, de los que es importante prevenir su degradación por los jugos digestivo.
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El ABC de las plantas.
RandomGuía práctica de fitoterapia y complementos de la dieta. Plantas medicinales en tu farmacia. La Fitoterapia, Medicina Natural.
